Missouri, EE.UU. (Un grupo nacional de vida silvestre otorgó el lunes subvenciones por 3,3 millones de dólares como parte de un esfuerzo inicial para detener el preocupante declive de la mariposa monarca, con la esperanza de que el plan ayude a restaurar unas 13.355 hectáreas (33.000 acres) de hábitat del lepidóptero.
Las 22 subvenciones anunciadas por la Fundación Nacional de Pesca y Vida Silvestre serán duplicadas a 6,7 millones de dólares por los beneficiarios, que están en más de una decena de estados y son algunos de los 115 solicitantes de fondos para el esfuerzo conservacionista que se lanzó a inicios del año.
“Estamos contentos de haber generado tantas excelentes propuestas”, dijo Lila Helms, la vicepresidenta ejecutiva de asuntos externos de la fundación. Las subvenciones “financiarán proyectos en tierra que contribuirán rápidamente a una población más saludable y sustentable de monarcas”.
Muchas de las subvenciones otorgadas el lunes, de unos 250.000 dólares cada una, fueron destinadas a reforzar los pastizales y otros hábitats de la mariposa monarca en sus corredores migratorios.
Un proyecto busca restaurar más de 404 hectáreas (1.000 acres) de hábitat de las monarcas en las Dakotas, mientras que otro incluye a la Fundación de Herencia Natural de Iowa, que busca mejorar 2.832 hectáreas (7.000 acres) a lo largo de dos corredores migratorios de la mariposa.
Los beneficiarios de las subvenciones se encuentran en Arizona, California, Illinois, Iowa, Kansas, Michigan, Missouri, Nebraska, North Dakota, Nevada, Oklahoma, South Dakota, Texas y Washington.
Casi 1,2 millones de dólares fueron donados por Monsanto Co., con sede en St. Louis, fabricante del herbicida Roundup, al que los críticos han acusado de destruir parte del hábitat de la mariposa.
En marzo, Monsanto señaló que comprometería un total de 4 millones de dólares, la mayoría de ellos a través de su fundación Fondo de Conservación de la Mariposa Monarca.
La mariposa monarca está bajo consideración para recibir protección federal debido a que su población en Estados Unidos se ha reducido en más de un 90% en las últimas dos décadas, para preocupación de ambientalistas y científicos.
Se responsabiliza de gran parte del declive a la destrucción de su hábitat, que incluye el algodoncillo en el que las mariposas ponen los huevos y es la única fuente de alimento para sus orugas antes de desarrollarse en los vistosos insectos anaranjados con negro.
Algunas poblaciones de monarcas migran miles de kilómetros (millas) para aparearse y pasar el invierno en California y México. Pero a lo largo del trayecto hay menos algodoncillo, debido al incremento de las zonas dedicadas al cultivo de maíz y soya, así como al aumento en construcciones y la sequía que alcanzó su punto más alto en 2012.
Los ambientalistas aseguran que el declive de la mariposa coincide con el aumento en el uso de Roundup, y a mayores superficies de siembra de cosechas resistentes al herbicida. Monsanto señaló que una tercera parte de las contribuciones por 3,6 millones de dólares igualan la donación del Servicio Federal de Pesca y Vida Silvestre.