Toyota acaba de desarrollar una nueva batería que irá destinada a vehículos híbridos eléctricos (HEV) con el objetivo de reducir las emisiones de gases CO2.
La llegada de nuevos vehículos electrificados forma parte del ‘Desafío Medioambiental Toyota 2050’, que cuenta con distintos objetivos a alcanzar en las próximas décadas.
Entre estos objetivos, Toyota se ha comprometido a reducir en un 90% las emisiones de CO2 de los vehículos nuevos en el año 2050.
Según ha asegurado la marca, afrontar los retos medioambientales, como el calentamiento global es uno de los pilares fundamentales para Toyota.
La firma nipona lleva apostando por la progresiva electrificación de la gama desde 1997.
Ese año se estrenó su primer vehículo híbrido, el Toyota Prius.
La estrategia de Toyota se centra en acelerar sus planes de desarrollo y lanzamiento de vehículos híbridos y eléctricos, además de vehículos eléctricos de pila de combustible de hidrógeno, cubriendo así todas las necesidades de sus clientes. El pasado año Toyota anunció que otorgaría licencias libres de derechos sobre cerca de 24,000 patentes de la que es titular de tecnologías relacionadas con la electrificación de vehículos y ofrecería asistencia técnica gratuita a otros fabricantes que desarrollen y comercialicen vehículos electrificados cuando utilicen los motores, baterías, PCU y ECU de control de Toyota.