Una nueva depresión tropical provocará en República Dominicana precipitaciones, tormentas eléctricas y ráfagas de viento, en especial en la zona costera caribeña, días después del paso del huracán Fiona, informó hoy la Oficina Nacional de Meteorología (Onamet).
En su último boletín, la Onamet indica que esas tormentas y vientos serán más frecuentes esta tarde y se extenderán por la noche, por lo que recomienda navegar con precaución cerca de la costa en el litoral caribeño.
Según el instituto meteorológico, la depresión tropical 9 se forma en la latitud 13.9 norte y 68.6 oeste, a 611 kilómetros al sur de República Dominicana, con vientos de 55 kilómetros por hora y se mueve al oeste/noroeste a 20 km/h en aguas del mar Caribe.
Se espera que el sábado alcance la categoría de tormenta tropical cerca de la isla de Jamaica y que esa jornada en República Dominicana haya cielos nublados con aguaceros, tormentas eléctricas y ráfagas de viento, más intensas y frecuentes por la tarde/noche local.
Desplazados son ahora 43,540 y las viviendas dañadas suman 17,400
A causa de ello, la Onamet mantiene los avisos y alertas meteorológicas ante posibles crecidas de ríos, arroyos y cañadas, así como inundaciones urbanas y deslizamientos de tierra.
Además, se vigilan dos ondas tropicales, la primera de ellas en el Atlántico medio con bajo potencial (20 %) en 48 horas, mientras que la segunda está próxima a las costas de África con porcentaje medio 70 % en 48 horas para convertirse en ciclón.
La llegada de la nueva depresión se produce solo días después de que el huracán Fiona tocara tierra en República Dominicana el lunes pasado con categoría 1, causando cuantiosos daños materiales y víctimas.
Huracán Fiona y cómo los materiales verdes impactan la gestión del riesgo
Al igual que la tormenta tropical Gastón, Fiona no representa ya peligro para el país por su posición y desplazamiento.
De acuerdo con el Centro Nacional estadounidense de Huracanes, Fiona ha dejado la islas Bermudas y ha enfilado hacia la costa este de Canadá, en alerta ante el paso del ciclón con vientos de hasta 205 kilómetros por hora.
Este huracán, tercero de este año en el Atlántico, ha perdido fuerza y ha descendido a categoría 3.