Tennessee. El último disco de Glen Campbell, «Adios», es una despedida para el músico galardonado con el Grammy y personalidad de televisión, aunque su hija dice que también fue terapéutico para él.
Campbell, famoso por éxitos como «Wichita Lineman» y «Gentle on My Mind», fue diagnosticado con Alzheimer en 2011 después de que presentara síntomas de pérdida de memoria.
Su gira de despedida en ese mismo año fue retratada en un documental nominado al Oscar titulado «Glen Campbell: I’ll Be Me», que ganó un Grammy por su banda sonora. Pero poco después de que la gira terminó en 2012, la familia de Campbell sabía que quizá nunca tendría otra oportunidad de grabar un álbum.
«Veíamos un declive, así que queríamos que pudiera hacer esto mientras fuera posible», dijo Ashley Campbell. «Definitivamente no pensamos que habría otro álbum». El disco, lanzado el viernes, incluye canciones que a Campbell le encantaba cantar, pero que nunca grabó, algunas de las cuales hicieron famosas Bob Dylan, Linda Ronstadt y Johnny Cash.
Su viejo intérprete de banjo Carl Jackson produjo el disco, que tiene como invitados a Willie Nelson, Vince Gill y a su hija, quien también es cantante. «Cuando lo grabamos él todavía podía cantar esas canciones», dijo Campbell. «Y lo podíamos meter en el estudio, y fuimos muy felices en el estudio y trabajando con Carl. Sin duda fue terapéutico para él».
Ahora, el cantante de 81 años está en las últimas etapas del Alzheimer y de acuerdo con su hija tiene afasia, lo que significa que no puede hablar o entender cuando le hablan. La hija agregó que el astro tiene buen ánimo y se encuentra en un centro donde cuidan de pacientes con enfermedades de la memoria en Nashville.
«Se encuentra mucho mejor que mucha gente en esa misma situación», dijo Campbell. «En vez de estar asustado y confundido todo el tiempo, simplemente está feliz y le encanta estar rodeado de gente, disfruta sus postres y todo eso. Es agradable saber que hay un lado brillante en medio de esta oscuridad».
Campbell dijo que todavía toca música para su padre, incluso si él no siempre entiende que está escuchando música. «A veces si te sientas por un tiempo suficiente o si se encuentra en un punto correcto en su cabeza, lo escuchará y lo disfruta», dijo Campbell.
«Cierra sus ojos y lo puede sentir, mueve los dedos de sus pies o empieza a cantar de alguna otra manera. No canta lo que tú cantas, pero se da cuenta de que estás cantando y trata de cantar contigo. Por momentos le llega, definitivamente vale la pena hacerlo».