Al tomar como marco referencial los comportamientos decisionales de los altos organismos constitucionales del país, llámese Junta Central Electoral, Tribunal Constitucional, Suprema Corte de Justicia y Cámara de Cuentas, requieren de urge cambio en sus composiciones.
Es lamentable que los organismos llamados a hacer justicia, a ser árbitros de las actividades que realicen los ciudadanos, se sientan comprometidos con una organización política, y no con la sociedad.
Pues es funesto para la buena convivencia y la democracia mantener un modelo de arbitraje que solo practique la desigualdad, llevando al país hacia un retroceso en materia electoral, de impartir justicia y sancionar a quienes realmente infringen las leyes y la ética pública.
Bajo estas tristes e insólitas realidades que caracterizaron a nuestras altas cortes y en específico a la Junta Central electoral, reflejan en gran deterioro institucional que existe en el país.
Entendemos que ya es tiempo para despolitizar estas instituciones que se deben conformar con personas ajenas a partidos políticos. Ciudadanos con altos niveles de moralidad pública y privada que no se sienten comprometidos con ningún partido.
Nuestra sociedad cuenta con miles de ciudadanos y ciudadanas altamente calificados, honestos con elevados perfiles para desempeñar con imparcialidad, responsabilidad y decoro posiciones en las altas cortes, Suprema Corte, Cámara de Cuentas y Junta Central Electoral.
En consecuencia, para que el país goce de tener organismos constituciones no partidistas, proponemos que los mismos sean seleccionados por un Consejo Nacional Multisectorial.
Dicho consejo deberá estar conformado por representantes de las Iglesias, partidos políticos, sociedad civil, movimientos independientes, participación ciudadana, colegio de abogados, CONEP, Sector Sindical, Asociación de Rectores de Universidades y ADOCCO.
El consejo tendrá vigencia de ochos años con autoridad deliberativa y responsabilidades de a través de concurso público y contradictorio seleccionar los postulantes no partidistas de la sociedad.
El consejo se sustentará con recursos de organismos internacionales, esto con la finalidad de no ser influenciado y contaminado con el partido gobernante ni ningún funcionario que quiera limitar sus acciones por depender del gobierno de turno.
El momento es propicio para que nuestra sociedad fortalezca su institucionalidad, sus organismos públicos y judiciales y fiscalización de los actos económicos de las entidades del Estado.