Durante varias décadas la economía agrícola de la República Dominicana descansaba en la producción y exportación de los llamados cultivos postres. Por múltiples razones que no es propicio desarrollar aquí, se abandonaron las políticas públicas dirigidas a atender estos importantes cultivos; salvo el tabaco que repuntó por iniciativa del sector privado.
Empero, debemos recomenzar por el cacao, que actualmente registra un significativo incremento de precio en los mercados internacionales, que se refleja en el país; hoy a nivel de finca, un quintal de cacao fresco se vende a 10 mil pesos.
El gobierno debe retomar el Plan de Acción Cacaotera 2021-2025 inyectando recursos ahora e incluirlos en el presupuesto 2025, produciendo 7 u 8 millones de plantas para renovar el 60% de las plantaciones viejas. El cacao lo merece, pues involucra 42,000 familias que cultivan 2.7 millones de tareas. Luego continuará el café.