Hemiciclo de la camara de diputados. En foto: Radhames Camacho, presidente de la camara. 11-02-19 Foto: José Adames Arias
La Cámara de Diputados se vio precisada a suspender la sesión ordinaria de ayer a causa de una protesta de los legisladores del Partido Revolucionario Moderno (PRM), que decidieron romper el quórum para que el oficialismo no aprobara un préstamo de 300 millones de dólares, que sería destinado a la consecución de un plan de contingencia.
A la negativa del conocimiento del préstamo se unieron diputados del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC).
Los perremeístas se hicieron opositores aprovechando que los diputados del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) no contaban con la matrícula suficiente para debatir y sancionar la resolución que ratifica el préstamo de 300 millones de dólares, gestionado por el Poder Ejecutivo a través del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), argumentando que los fondos con el organismo internacional son para planes de contingencia en emergencia y mitigación de desastres.
La bancada política del PRM le salió al frente a los peledeístas, que sin perder tiempo, ayer convocaron a la tercera sesión de la semana para hoy jueves, cuando se prepararan para reforzar el quórum.
El diputado Francisco Paulino llevó la voz cantante y afirmó que el PRM no acuerda más endeudamiento para el país de manera definitiva. manifestó que cuando se firme el préstamo de los 300 millones de dólares, a partir de los dos meses, aunque no se utilicen los fondos, generará un costo de 0.75 centavos de dólar. El intento de debatir el préstamo provócó un escarceo en el hemiciclo y su presidente, Radhamés Cámacho, la suspendió.
PLD lo defiende
El presidente de la Comisión Permanente de Hacienda de la Cámara de Diputados, Ramón Cabrera, negó que República Dominicana se endeude con este empréstito de 300 millones de dólares. Sostuvo que el préstamo sólo pagará intereses si se activa, y de no ser así, no habrá que incurrir en pagos. Pero la aclaración del oficialismo no convenció a los perremeístas y a los reformistas. Desde el año pasado se intenta conseguir aprobar esta resolución y el PRM la concibe como línea de crédito.