El presidente del Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP), Rafael Blanco Canto, consideró ayer que el país debe tener la capacidad de acordar una única manera de hacer las cosas, sin mirar personas, instituciones o circunstancias, abocándose a un nuevo gran pacto social que establezca la nueva forma de vivir y relacionarse con la igualdad ante la ley y el Estado, donde la ley no se aplique de manera selectiva ni arbitraria y que nadie pueda estar por encima de ella.

Se debe superar la cultura social de querer imponer a toda norma que se encuentre por debajo de nuestro poder o influencia personal, dijo Blanco Canto, al hablar como orador principal en el almuerzo mensual de la Cámara Americana de Comercio de la República Dominicana (AMCHAMDR).

Señaló que los dominicanos no pueden postergar un minuto más ser gobernados por reglas de juego claras, transparentes y duraderas, pero sobre todo diseñar mecanismos fuertes que hagan obligatorio el cumplimiento de las leyes.

El presidente del CONEP afirmó que “es hora de dejar atrás el desorden y la anarquía propios del subdesarrollo” y un paso importante para lograr eso es la aprobación de tres leyes que son necesarias: Ley de Garantías Electorales, Ley de Partidos y Agrupaciones Políticas y Ley de Responsabilidad Fiscal, puesto que sin ellas las elecciones no serían creíbles.

Consideró preocupante para el país la gran fragmentación del territorio, y dijo que el CONEP se opone a cualquier propósito de crear nuevas provincias.

Blanco Canto señaló que es importante comprender que un sistema político estable y una institucionalidad democrática fuerte son materia prima para la existencia de un adecuado clima de negocios.

En cuanto al Plan Nacional de Regularización de Extranjeros, reiteró el apoyo del CONEP a dicha medida y afirmó que “es tiempo de ordenar nuestra casa y comenzar a resolver una situación que no ha sido otra cosa que un gran cúmulo de problemas de muchos años”.

Advertencia. El presidente del CONEP advirtió que si no se toma conciencia de los retos y medidas que debe tomar el país para seguir avanzando se podría caer en “la trampa del ingreso medio”, como lo definen algunos economistas.

Explicó que la trampa de los países de ingreso medio está compuesta por cuatro elementos: en primer lugar los problemas de competitividad, productividad y falta de dinamismo en las exportaciones; en segundo lugar, la debilidad de las redes de protección social; en tercer lugar, fallas en el mercado laboral y formación de capital humano, y en cuarto lugar la fragilidad o ineficiencia de las instituciones, situación a la que no escapa la República Dominicana .

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Regularización

El presidente de Cámara Americana de Comercio de la República Dominicana (AMCHAMDR), Gustavo Tavares, dijo que Plan Nacional de Regularización de Extranjeros es un tema de alta sensibilidad social y económica para cualquier país del mundo. Abogó porque se ejecute una estrategia de comunicación nacional e internacional profesional, dinámica y sostenida para salvaguardar y potenciar la imagen y reputación del país, fundamental a la hora de generar confianza de afinidad para la buena marcha de los negocios, base del desarrollo económico.