Cuba y Estados Unidos, entre otros países, han comenzado a hacer competencia a la República Dominicana con el otorgamiento de incentivos a las zonas francas.
Para marzo de este año Cuba aprobará una nueva ley para “perfeccionar” la inversión extranjera. El presidente de la isla, Raúl Castro Ruz, destacó que la inversión foránea es de singular importancia para dinamizar el desarrollo económico y social del país, tomando en cuenta que la ley vigente fue aprobada en 1995 y contempla la inversión extranjera en asociación con el Estado, como fuente de capital y mercado.
Mientras en Estados Unidos el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, lanzó el programa “Start-up NY”, una iniciativa que cambia las reglas de juego, y crea zonas libres de impuestos para atraer y hacer crecer nuevos negocios en todo el Estado.
La iniciativa “Start-up NY” busca acelerar el emprendimiento y la generación de empleos a gran escala en Nueva York. La Universidad Estatal de Nueva York, junto con otras comunidades universitarias, sirve como marco del programa “Start-up NY” para atraer empresas de tecnología y otras en proceso de expansión, capital riesgo, nuevos negocios e inversiones de todo el mundo.
Bajo este programa, las empresas tienen la oportunidad de operar completamente libres del pago de impuestos durante 10 años en los campus y los espacios elegibles.
Tanto la nueva ley de Cuba como el programa de los Estados Unidos tienen como objetivo atraer masivamente inversiones, lo que llevaría a que empresas que tienen operaciones en zonas francas de República Dominicana y otros países de la región sean tentados a trasladarse a estos lugares.
Ante el alza de los costos de operaciones de China, como mano de obra, energía eléctrica y terrenos, fábricas instaladas en ese país están mudando sus operaciones a Estados Unidos y a otros países de la región.
La búsqueda de los fabricantes asiáticos, así como de otros países de zonas que les permitan ahorrar dinero en la producción, provocará a corto y mediano plazos una guerra por ofrecer el mejor ambiente para invertir.
Cuba, además, inaugurará a finales de este mes la primera fase de la Zona Especial de Desarrollo en el Mariel, 45 kilómetros al oeste de La Habana, que incluirá la apertura de un megapuerto para barcos de gran calado, que podrán circular en el Atlántico cuando termine la modernización del Canal de Panamá en el año 2015.