Sao Paulo. El desempleo en Brasil llegó al 10,9 % en el primer trimestre del año, lo que supone el mayor nivel desde 2012, cuando comenzó el Estudio Nacional por Muestra de Domicilios Continuo (PNAD Continuo), un indicador que incluye las recomendaciones de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
La tasa registrada en el primer trimestre del 2016 es 1,9 puntos porcentuales superior a la del trimestre comprendido entre octubre y diciembre de 2015. Con el aumento del desempleo el número de parados llegó a los 11,1 millones de personas, un 22,2 % más que a finales de diciembre de 2015 y un 39,8 % superior a la del mismo periodo del año anterior. La población ocupada se redujo un 1,7 % frente al trimestre octubre-diciembre y fue de 90,6 millones de personas en marzo de este año.
El desempleo ha ido aumentando progresivamente en los últimos meses en Brasil y es reflejo de la grave crisis económica y política que vive el mayor país de Suramérica. En medio de la incertidumbre y el aumento de la inflación, que en 2015 superó el 10 %, las familias brasileñas han reducido fuertemente el consumo, que durante años fue el motor de la economía.
El Producto Interior Bruto (PIB) del país cayó un 3,8 % en 2015 y, según las previsiones de Gobierno, retrocederá otro 3,1 % este año.