Contar con una Asociación de Críticos a nivel profesional es fundamental para la evaluación, la orientación y el avance artísticos, las relaciones con el medio del arte y las artes visuales, hasta para la vida cultural en conjunto.
Parece una utopía realizada, que la región del Caribe insular, con su multiplicidad de pequeños territorios, y a pesar -con la muy relativa excepción de Cuba y Haití- de la ignorancia que sufre desde las metrópolis-, haya desarrollado internamente la teoría y la comunicación en un campo difícil, minoritario, sino relegado en cualquier parte del mundo, incluyendo a menudo esferas oficiales e instituciones públicas de la cultura.
La Asociación Dominicana de Críticos de Arte, fundada en el 1981, en gran medida gracias a las gestiones de Silvano Lora, ha tenido un papel gestor para la creación de las Asociaciones de Críticos de Arte de Haití, de Puerto Rico, del Caribe Sur y de Panamá.
No creemos que ninguna otra asociación de críticos haya contribuido tanto a la integración de los profesionales de la crítica en una perspectiva regional, enfrentando el desconocimiento de sus valores y talentos. Otro peldaño fue que, casi desde su creación, la Asociación Puertorriqueña pidió celebrar un Congreso y lo hizo exitosamente. ¡Causó una sorpresa internacional!
La AICA del Caribe Sur. Ahora bien, la muy joven Asociación AICA del Caribe Sur, creada en 1997, está demostrando una eficiencia insospechada.
La agrupación está conformada por críticos de arte de distintas islas, situadas al sur de Puerto Rico. Siendo muy pequeños, esos territorios insulares -estados o departamentos de metrópolis-, no tienen, cada uno, más de dos, tres o cuatro profesionales de la crítica, siendo diez un número mínimo para una asociación nacional.
La Asociación Internacional de Críticos de Arte (AICA) autorizó la constitución innovadora de una asociación de tipo sub-regional y la integró como sección al gran conjunto formado por más de cien asociaciones nacionales, existentes y activas, en el mundo.
AICA del Caribe Sur incluye principalmente a Guadalupe, Martinica, Barbados, Jamaica, Guyana y Trinidad. Cabe subrayar que ha obviado las barreras geo-lingüísticas -tan vigentes todavía-, y su área de trabajo se extiende a territorios anglófonos y francófonos. No se descarta que pronto tienda una mano al Caribe “holandófono”, huérfano de una incorporación zonal actualmente, y, a criterio nuestro, necesitado de una afiliación que contribuya a difundir e interrelacionar su riqueza creativa.
Objetivos y avances. Siguiendo los objetivos de la AICA en su definición, adaptados a medios y situación particulares, la asociación del Caribe sureño –“Association de la Caraïbe du Sud” y “South Caribbean Association”–, persigue desarrollar la comunicación, la interacción, la promoción, para los críticos de arte, así como, en un contexto general, para las colectividades y los profesionales dedicados a las artes visuales. Hay ciertamente solidaridad y perseverancia en esa agrupación, encabezada por Dominique Brébion, de Martinica, profesora, crítica y gestora en arte, bien conocida en República Dominicana, quien lleva adelante la organización de diálogos y coloquios, asambleas y seminarios intercaribeños, con invitados externos prestigiosos. Ya, en el 2003, Barbados y Martinica celebraron un Congreso de la AICA intercontinental, en las dos islas sucesivamente, siendo Santo Domingo sede de un pre-congreso, ¡que lógicamente no contó con participantes significativos, por los costos, el tiempo y la falta de subvenciones!
Una excelente iniciativa. Ahora bien, el éxito y aporte sureño más importante es ciertamente la divulgación, abierta y gratuita, por internet, gracias al sitio web, blog y colaboración de una agencia de prensa mundial, de los textos escritos por especialistas del área –o externos–, concernientes al arte del Caribe, con fotografías recomendadas, en todos sus aspectos, incluyendo mercado, problemas, funciones y funcionamiento. Por supuesto, se difunden –en español, francés e inglés– temas de gran interés: es un verdadero servicio que presta, inteligente y generosamente, la Asociación de Críticos del Caribe Sur. ¡La crítica de arte caribeña va conquistando espacios planetarios!