Democratic presidential nominee Hillary Clinton and former President Bill Clinton greet supporters after casting their ballots in Chappaqua, New York on November 8, 2016. / AFP / EDUARDO MUNOZ ALVAREZ
La candidata demócrata a la Presidencia de Estados Unidos, Hillary Clinton, supera en más de un millón de votos al presidente electo, el republicano Donald Trump, que se impuso en el sistema de Colegio Electoral, al cual calificó ayer de “genialidad».
El escrutinio, que sigue en marcha en algunos estados que están procesando votos en ausencia o depositados en el extranjero, ya da una ventaja de más de un millón de papeletas a Clinton (61.96 millones) frente a Trump (60.96 millones), y sitúa el porcentaje total en 47.8 % para la demócrata y 47 % para el republicano.
No obstante, Trump se impuso en las elecciones debido al sistema de Colegio Electoral en el que cada estado adjudica al ganador de la demarcación territorial un número de compromisarios estimado conforme a su peso demográfico y equivalente al número de sus representantes en el Congreso. El presidente electo se hizo con al menos 290 compromisarios de los 538 de los que adjudica el sistema de Colegio Electoral, por lo que pese a tener un menor número de votos a nivel nacional, el republicano es el ganador de las elecciones del 8 noviembre.
Trump recordó en Twitter que el sistema de Colegio Electoral es una “genialidad porque hace que todos los estados, incluidos los pequeños, formen parte de la partida». “Si la elección estuviera basada en el total del voto popular habría hecho campaña en Nueva York, Florida y California y habría ganado aún por un mayor margen y con más facilidad”, aseguró Trump. No obstante, en 2012, tras la victoria electoral del presidente Barack Obama sobre su rival republicano, Mitt Romney, Trump afirmó que “el colegio electoral es un desastre para nuestra democracia».
Estados como Nueva York o California son plazas aseguradas para los demócratas, por lo que los candidatos presidenciales no suelen hacer campaña allí; del mismo modo Texas, el otro caladero de votos electorales, se inclina tradicionalmente por los republicanos y no es parada obligada durante la campaña. Medios han denunciado que algunas web están extendiendo noticias falsas en las que se asegura que Trump ha ganado el voto popular.