La Dirección de Registro Civil del Distrito Nacional permitió a una pareja argentina declarar a su hija con el apellido materno primero, con lo que la convierte en la primera dominicana en llevarlo. La madre, Romina Santroni, obtuvo la ciudadanía en 2012. Esto fue posible en virtud de que el lugar de procedencia de los padres permite la práctica.

En el país no existe disposición legal alguna que regule sobre el orden de los apellidos, sino que ha sido una imposición por usos y costumbres que se coloque el paterno primero. Como lo comprobaron los padres de Uma, Romina Santroni y Fernando Figheras, la gente cree que existe una ley que establece que primero debe ir el apellido del padre .

La pareja depositó un recurso ante el Tribunal Constitucional contra la Ley 659 de Actos de Estado Civil y el artículo 57 del Código Civil para que, en base al principio de igualdad entre el hombre y la mujer, se establezca el procedimiento para que en lo adelante todas las familias dominicanas tengan el derecho de elección al orden de los apellidos de sus hijos.

Inspirados en el principio constitucional que proclama que todas las personas sin distinciones por razones de género “reciben la misma protección y trato de las instituciones, autoridades y demás personas y gozan de los mismos derechos, libertades y oportunidades” han solicitado al Tribunal Constitucional que reconozca que el orden de los apellidos es optativo a elección de los padres.