El presidente Luis Abinader participó ayer en la XXVII Conferencia Anual del Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF), en la sede de la Organización de Estados Americanos (OEA), donde reafirmó su compromiso con la democracia, el desarrollo sostenible y detalló el proceso de reforma de la Constitución que se realiza en el país.
“Las tensiones políticas y sociales desafían constantemente los cimientos democráticos, por lo que debemos reafirmar nuestro compromiso con este principio, asegurando que las instituciones no solo sean democráticas en su forma, sino, también en su esencia”, planteó.
En ese orden, explicó que “con la mirada puesta en el fortalecimiento de la democracia y los derechos humanos”, hace dos semanas presentó una reforma constitucional ante el Congreso Nacional, la cual busca consolidar el límite al tiempo permitido a un presidente para permanecer en el poder, que ahora son dos períodos consecutivos y nunca más.
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Agregó que en esa pieza se propone una “cláusula pétrea”, para evitar una futura reforma constitucional que permita la entronización en el poder de un nuevo gobernante.
Explicó que esa cláusula tendrá el mismo estatus de los otros principios inamovibles consagrados por una norma constitucional, la cual dispone categóricamente que “nuestra forma de gobierno será siempre civil, republicana, democrática y representativa”.
También resaltó que esa reforma incluye, entre otros aspectos, el fortalecimiento de la independencia del Ministerio Público en la lucha contra la corrupción y la impunidad, con la designación de un procurador general que no sea una facultad exclusiva del presidente de la República, sino, una decisión conjunta con el Consejo Nacional de la Magistratura.
“El pueblo dominicano me entregó, mediante su voto en las pasadas elecciones, la mayoría congresual más extensa en la historia de nuestra reciente democracia y mi respuesta a ese enorme compromiso y responsabilidad, es limitar el poder al actual y futuros gobernantes. Estoy convencido que, al momento de ser juzgada en el futuro, esta reforma será vista como un paso decisivo para la consolidación de una democracia más fuerte y moderna”, manifestó.
Resaltó que “República Dominicana está comprometida a liderar con el ejemplo, trabajando estrechamente con nuestros socios regionales e internacionales, para construir un futuro de prosperidad compartida”, dijo.
Agregó que “juntos, podemos crear un hemisferio más fuerte, más justo y más unido, donde el crecimiento económico beneficie a todos, la estabilidad sea el cimiento de nuestro progreso común y la democracia se profundice y fortalezca, garantizando el respeto por las libertades y los derechos fundamentales de todos”.
Consideró que la defensa de la democracia no se limita a mejorar los aspectos procedimentales.
“Como ya dije y como expresara en la Cumbre por la Democracia al presidente Joe Biden, debemos hacer todos los esfuerzos necesarios para que la democracia se traduzca en el bienestar concreto en la vida cotidiana de los ciudadanos”, refirió Abinader.
Sobre la solución de la crisis en Haití, el presidente Abinader expresó: “esto es una necesidad estratégica para la seguridad en el Caribe. Continuaremos colaborando con la comunidad internacional, para lograr este objetivo, no debemos permitir que Haití vuelva a caer en el olvido”.
Agregó que otro reto de gran envergadura en la lucha por preservar la democracia, es la construcción de Estados de bienestar, porque en su segundo mandato, estará enfocado en fortalecer las condiciones a nivel regional para promover desarrollo económico sostenible.
Citó los logros del país en diversos ámbitos.