Anulan pena de muerte a una mujer que mató a su marido tras meses de maltrato

Anulan pena de muerte a una mujer que mató a su marido tras meses de maltrato

Pekín. El Tribunal Popular Supremo de China anuló hoy la pena de muerte a una mujer condenada por matar a su marido, que le había maltratado durante meses, en el primer caso en el que la violencia doméstica es considerada como eximente de la pena capital en China, según informaron los medios locales.

Li Yan, de 43 años, había sido condenada a muerte en 2013 por los tribunales provinciales, tres años después de haber matado a su marido, Tan Yong, quien le sometía a continuos maltratos, como encerrarla en un balcón en invierno o apagar cigarrillos en su cara, relató hoy el diario “South China Morning Post».

El caso se ha convertido en los últimos años en un símbolo de la lucha de las mujeres chinas contra la violencia doméstica que muchas de ellas sufren, dado que en 2010 Li denunció repetidamente ante policía y autoridades los malos tratos de su marido y pidió una orden de alejamiento, pero ésta le fue denegada.   El 3 de noviembre de aquel año, Tan golpeó a Li y amenazó con matarla con una escopeta de aire comprimido, ante lo cual la mujer maltratada disparó otro rifle y acabó con la vida de su marido, al que descuartizó.

Tras ser detenida, juzgada y condenada a muerte, miles de personas en China firmaron una petición en la que exigían que la pena capital fuera revisada, entre ellos famosos activistas de derechos humanos como Teng Biao, defensor de la abolición de las ejecuciones en el país asiático.

Al conocerse la anulación de la pena, Amnistía Internacional emitió hoy un comunicado en el que destacó que el caso de Li “resalta la necesidad urgente de que las autoridades hagan más para prevenir la violencia contra las mujeres” en China, país donde la legislación contra el maltrato aún no está muy desarrollada.   “Nunca se iba a hacer justicia ejecutando a Li Yan.

La acción del Tribunal Supremo es significativa, y es la decisión correcta”, afirmó en un comunicado William Nee, investigador sobre China para la ONG con sede en Londres.   Nee subrayó que el trágico caso podría haberse evitado si las autoridades hubieran dado a Li la necesaria protección contra los malos tratos de su abusivo marido, quien durante uno de sus actos de violencia llegó a cortar un dedo de su esposa.

Aunque no hay cifras oficiales, se cree que en China un gran porcentaje de las mujeres sufren o han sufrido maltratos, especialmente en zonas rurales.