Después de ocho años de ausencia de los escenarios dominicanos, el grupo cristiano Barak regresó la noche del sábado a su país como parte de su gira “Dios es fuerte”, con un concierto dedicado a las víctimas del desplome del techo de la discoteca Jet Set.
La agrupación dominicana brindó una noche cargada de adoración, esperanza y profundo sentido humano, en el Estadio Quisqueya de la capital dominicano, en una propuesta que tuvo más de cuatro horas de duración.
Con el aforo deportivo completamente lleno, Barak, agrupación encabezada por su vocalista Robert Green, inició con las canciones “Dios fuerte”, “Profetizaré”, “La tierra canta” y “Libre soy”, provocando las emociones del público. Antes, el pastor Santiago Ponciano elevó una oración por los presentes y por toda la nación dominicana, creando un ambiente de recogimiento espiritual en la casa de los Leones del Escogido y Tigres del Licey.
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Uno de los momentos más emotivos de las más de cuatro horas de presentación fue el homenaje póstumo a, al menos, 225 víctimas de la tragedia. Este tributo se realizó al ritmo de la canción “Todo va a estar bien”, mientras globos blancos fueron lanzados al cielo y en pantalla se proyectaban imágenes del desastre y de algunas de las personas que perdieron la vida. Durante esta pausa especial, la pastora Yesennia Then ofreció un mensaje de consuelo y reflexión que tocó profundamente al público.
Entre los invitados especiales de la noche destacaron Paul Wilbur, Averly y el dúo Tercer Cielo, quienes interpretaron su icónico tema “Creeré”, llenando el estadio de emoción.
Otro de los momentos más esperados fue la participación del reconocido cantante norteamericano Israel Houghton, quien hizo un remix en vivo de sus éxitos junto a la banda Barak, desatando la euforia de los asistentes.
También se sumó al escenario el rapero cristiano Redimi2, quien interpretó “Obra en mí”, “Ven Espíritu Santo” y “A Danzar”, fusionando adoración con energía juvenil, junto a Barak.
El espectáculo logró conectar con más de 240,000 personas que siguieron la transmisión en vivo a través de YouTube, convirtiéndolo en uno de los conciertos cristianos más vistos en la historia reciente del país.
Esa noche del sábado también se rindió homenaje a los héroes anónimos que actuaron durante la tragedia: bomberos, Defensa Civil, Policía Nacional, COE y otras autoridades que brindaron auxilio inmediato y salvaron vidas.