Consultorio de Nutrición: Resección gástrica

Consultorio de Nutrición: Resección gástrica

P: ¿Cómo manejar las intolerancias alimentarias después de una resección gástrica?

R: Los pacientes que han sido sometidos a la extirpación parcial o total del estómago deben modificar su patrón alimentario habitual a fin de preservar su estado nutricio y evitar las complicaciones o intolerancias alimentarias, las cuales identificamos a continuación, y a la vez, indicamos la forma de controlarlas.

1- Intolerancia a los azúcares. La evacuación gástrica rápida o llegada rápida de los azúcares al intestino delgado provoca calambres, dolor de estómago o diarrea, debido a que el desplazamiento del agua desde la sangre hacia la luz del intestino provoca hipotensión arterial; y por otro lado, se libera mucha insulina causando hipoglucemia (glucosa baja en sangre). Otros síntomas que aparecen son taquicardia, sudoración y nerviosismo. Esto se controla haciendo comidas pequeñas, evitando los azúcares e incluyendo en cada comida alimentos proteicos (huevo hervido, pollo, pavo, pescado, etc) y ricos en pectina (guineo, manzana, mantequilla de maní o avena).

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2- Náuseas. Comer despacio, colocar el tenedor en la mesa después de cada bocado, realizar 5-6 comidas pequeñas y eliminar los alimentos grasosos, sustanciosos y picantes, separando los líquidos de los sólidos. Evitar recostarse antes de 2-3 horas después de comer.

3- Sensación de llenura. No comer ni beber de un sólo golpe, separar los líquidos de los sólidos y hacer

5-6 comidas pequeñas al día.

4- Reflujo. Realizar comidas pequeñas y masticar bien los alimentos. Evitar los alimentos grasosos, flatulentos y muy condimentados; cítricos, licuados, bebidas gaseosas y cafeinadas. Caminar después de las comidas y evitar recostarse antes de 2-3 horas después de comer.

5- Diarrea. Reducir las grasas, controlar los alimentos azucarados y con lactosa. Evitar los alcoholes de azúcares (manitol y sorbitol) presentes en gomas de mascar, caramelos solubles, gomitas, pastillas para la tos, postres lácteos, glaseados, etc. Tratar de consumir alimentos ricos en pectina (manzana, pera, guineo, plátano verde, mantequilla de maní, avena, etc). Cuidar la higiene de los alimentos.

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