El ministro de Interior y Policía, Carlos Amarante Baret, anunció hoy que el organismo ejercerá mayores controles y aplicará con mayor drasticidad la metodología para la expedición de las licencias para el porte y tenencia de las armas de fuego, para rastrearlas con mayor facilidad tras la comisión de algún acto reñido con la ley.
Dijo que la nueva Ley de Control de Armas, cuyos reglamentos de aplicación se espera estén listos antes de concluir el próximo mes de febrero, establece una serie de requisitos a cumplir por los solicitantes de licencias de armas de fuego.
El funcionario explicó que aunque resulte paradójico, las estadísticas indican que la mayoría de los hechos de violencia en el país se cometen con armas con registros legales, las cuales son despojadas a sus legítimos propietarios o a miembros de la Policía Nacional y/o de las Fuerzas Armadas.
“En mi gestión, ninguna persona que no cumpla con el perfil psicológico que será adoptado y no cumpla con todos los requerimientos, no podrá tener una licencia para arma de fuego”, destacó Amarante Baret.
Además resaltó que a partir de la nueva Ley de Armas, las autoridades serán rígidas y estrictas en su aplicación.
“No se trata de emitir licencias alegremente para alcanzar un nivel determinado de recaudación”, resaltó, para señalar que Interior y Policía tiene registradas 236 mil armas, cifra que para el ministro es elevada.
Subrayó que los análisis psicológicos serán reforzados “porque hay personas que no califican ni siquiera para tener un cuchillo de mesa”.