Los tatuajes no son algo nuevo, la costumbre es ancestral. Claro que en las últimas décadas su popularidad fue en aumento y hoy cobran máximo protagonismo los tinytattoos, que son tendencia de las manos de celebridades como Kendall Jenner, Zoë Kravitz y Zac Efron.
Discretos, delicados y situados estratégicamente en áreas específicas del cuerpo, estos tatuajes se han convertido en un “boom” entre los aficionados al arte corporal.
En Argentina y en muchos países del mundo, la demanda por este tipo de tatuaje es cada vez mayor, lo que indica que, lejos de desaparecer, esta moda seguirá creciendo.
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Rihanna fue una de las primeras mujeres que decidió lucir en los dedos unos diseños que dieron la vuelta al mundo. Después siguió sus pasos Cara Delevingne, quien no dudó en demostrar su pasión por la tinta cuando se tatuó la cabeza de un león en uno de sus nudillos.
Tras una época en la que los tatuajes en las falanges parecían crecer y crecer de tamaño, la tendencia ahora es rebajarlos a la mínima expresión. Siguiendo un poco la estética de los tatuajes hindúes realizados con henna con los que se decoran las manos de las novias en la India para su gran día, Hailey Bieber ya se ha posicionado como firme abanderada de los tiny tattoos en los dedos de las manos.
Pero, ¿cuáles son los pros y contras de la moda que invita a tatuarse las manos? La parte positiva de este tipo de tatuajes resulta ser bastante obvia: son casi imperceptibles peroconsiguen dar un toque rebelde perfecto y pueden ocultarse con anillos bonitos o incluso aplicando un poco de maquillaje en los dedos.
Además, estas ideas mini tienen otras ventajas como, por ejemplo, que se hacen más rápido que los grandes diseños. También duelen menos, al ser tatuajes pequeños de trazo fino, sin rellenos ni sombras. Por todos estos motivos, este tipo de imágenes en la piel, pequeñas, discretas y elegantes, se curan mejor.
“Si se hacen correctamente, deberían curarse y durar maravillosamente durante años, aunque hay algunos errores comunes que la gente comete al hacerse pequeños diseños”, aseguró en diálogo con Insider, Alissa Jung, escritora y tattoo artist.
En esta línea, cabe tener en cuenta que los dedos son una zona muy delicada y de ahí que puedan darse algunas complicaciones en relación a su acabado y, sobre todo, a su evolución. Dado que es una parte del cuerpo que está en contacto continuo con elementos como el agua, el jabón, la luz o el roce de cualquier objeto seguramente el desgaste de la tinta sea más rápido.
Según Jung, “la tinta se extiende de forma natural en el cuerpo con el paso del tiempo, por lo que un tatuaje demasiado pequeño probablemente se difuminará a medida que la piel envejezca”. “Un artista debería sugerir el mejor tamaño para la integridad de un tatuaje”, aseveró la experta.
Por otro lado, la naturaleza ósea y poco uniforme de los dedos hace que técnicamente sea más complicado que la aguja penetre de manera uniforme, por lo que puede quedar no tan definidos como si se realiza en otras partes del cuerpo. Por último, se debe tener en cuenta que las manos son una de las zonas en las que más se refleja el paso del tiempo y eso acelerará su transformación.
Consultada por Infobae, la médica especialista en medicina estética y láser Julia de la Torre coincidió en que la tendencia se ve cada vez más y reconoció que “hay tatuadores que se dedican exclusivamente a hacer esos tatuajes con poca carga de tinta y con una terminación súper fina”.
“Estamos sacando muchos tatuajes de los dedos porque los que se usaban antes no son los mismos que se usan ahora; antes eran con un trazo más grueso, mucho más grotesco y eso ya pasó de moda”, amplió la especialista, quien aclaró que “los tatuajes tanto en manos como en pies siempre hay que saber que desde el punto de vista de su remoción suelen necesitar más sesiones que los que están en una zona más cercana al tórax”.
“No todas las ubicaciones son iguales. Elegir un buen lugar ayudará a la longevidad de un tatuaje, especialmente con los diseños más pequeños. Las zonas que tienden a doblarse, estirarse o rozarse con la ropa, como las manos, los pies, los tobillos, los codos, la parte interior de los codos y la parte interior de las muñecas, suelen ser más difíciles de tatuar y curar”, finalizó Jung.