Hace unos meses colgué un tuit donde citaba lo siguiente: «Puede que no te agrade, pero la realidad es que Santiago Matías (Alofoke), es la cara de la comunicación digital dominicana hecha persona». Dicho tuit vino a raíz de unas fuertes críticas que estaba recibiendo el joven empresario por su formato de presentar personas que realizaban actos indecorosos vistos por toda la sociedad ´´virales« y que posteriormente los presentaba en su influyente plataforma en unas entrevistas.
El tema Alofoke hay que analizarlo más allá de lo que se ve en sus entrevistas virales, entrevistas que algunos les dan el calificativo de contenidos dañinos, pero son los primeros en verlos y disfrutarlos.
El aporte de Alofoke a la sociedad que pocos ven. En su plataforma hacen presencia personajes de reputación cuestionadas, disruptivas y con otras características que podríamos criticar, pero que al mismo tiempo son las que generan la atención de todos y ahí el punto, Alofoke ha acaparado la atención de la parte de la sociedad rebelde, abnegada, resentida que no se siente parte de las tomas de decisiones importantes y solo aprovechan su único espacio; las redes sociales, para hacerse sentir su condición humana y social.
Cuando Alofoke publica un tema de interés nacional o educativo no llega a las cien mil vistas, ahí la clara doble moral de algunos, pues claramente queda establecido que el interés no son los aportes educativos o culturales, sino lo que entretiene.
Alofoke está realizando una labor sin precedente alguno, pues ahora está logrando la migración de esa sociedad antes arriba descrita «la del bajo mundo« a un sector donde sin retirarles lo que les interesa, los encamina a consumir un producto que los oriente a esos conocimientos y valores que todos debemos tener con sus nuevas producciones como Esto no es radio, Finanzas con humor y otros proyectos que tiene en carpeta.
No sé si es una estrategia o plan por parte de él, o si él se está dando cuenta de lo que está logrando, pero de que esos anegados en las redes sociales que nadie los orienta, están consumiendo un contenido que les ayudará en sus capacidades, lo están haciendo, y eso es gracias a la atención, la redirección y el enfoque que está presentando Alofoke a toda la sociedad dominicana en sus producciones sin dejar su génesis.
Los cambios deben ocurrir de una manera que no genere fricción a los que necesitan cambiar, ni tampoco se les cuarte a los que ya entienden el cambio en las sociedades, tiene que ser un hibrido donde los ambos lados de las campanas sean escuchados y que de manera natural quede plasmado en cada quien y sacar sus conclusiones.
Alofoke hace tiempo tiene la atención de la sociedad dominicana, pero a lo que realmente debemos estar atento es a la transformación y el aporte que no se ve y esta ocurriendo en un tiempo récord que cualquier campaña desde el estado se tardaría años y años en viabilizar.
Hay que ver más allá de la curva y no quedarnos solo en las críticas, también hay que pasar al análisis.