El futuro ha llegado: impacto exponencial del desarrollo tecnológico en la educación

El futuro ha llegado: impacto exponencial del desarrollo tecnológico en la educación

Fernando Álvarez Bogaert.

A: la vicepresidenta y presidenta del Gabinete de Educación Raquel Peña y rectores universitarios (2/4)

El aprendizaje personalizado que ofrece la educación virtual, brinda al estudiantado el tiempo necesario para eliminar lagunas de conocimientos, construyendo una base sólida a la enseñanza futura; alcanzar este nivel de instrucción personalizada en las aulas tradicionales es irreal, convirtiendo tales mejoras en difíciles de lograr para la mayoría del estudiantado. Khan argumenta que la Inteligencia Artificial (IA) podría elevar a mayor nivel la educación al simular la tutoría humana, fomentando el pensamiento estratégico y adaptando las experiencias de instrucción a las necesidades individuales. Esta visión está directamente relacionada a la creencia del cofundador de Apple, Steve Jobs, sobre la capacidad de la tecnología en mejorar las capacidades humanas en todas sus vertientes.

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Una de las principales ventajas de este revolucionario proceso educativo, es su flexibilidad; los estudiantes pueden acceder a los cursos y materiales desde cualquier lugar y momento, siendo especialmente beneficioso para los que laboran o tienen otras responsabilidades, permitiendo, además, el aprendizaje a su propio ritmo, revisando el material correspondiente según la necesidad.

Las plataformas de educación virtual evolucionan, incluyen herramientas interactivas que fomentan la colaboración y la enseñanza activa. Foros de discusión, videoconferencias en tiempo real y, proyectos grupales en línea, permiten la interactuación entre estudiantes y profesores, simulando un entorno de estudio tradicional con las ventajas de lo digital.

La modalidad educativa que nos motiva a presentar el artículo en desarrollo, ofrece amplia variedad de recursos incluyendo: vídeos, tutoriales interactivos, simulaciones y juegos. Esta diversidad de recursos didácticos no solo atiende a diferentes estilos de amaestramiento, sino que, también, mantiene a los estudiantes comprometidos y motivados, además, permite la actualización de los materiales de modo ágil y reflejando los últimos avances en el campo de estudio seleccionado.

Las plataformas de educación virtual evolucionan, incluyen herramientas interactivas, permitiendo a los estudiantes recibir retroalimentación inmediata sobre su desempeño. Las plataformas pueden utilizar algoritmos para personalizar las evaluaciones y recomendaciones de estudios, adaptándose a las necesidades individuales del estudiantado.

Chris Anderson explora cómo la tecnología ha cambiado drásticamente con el tiempo, cita ejemplos como los asistentes personales controlados por voz (ejemplo, Siri y Alexa) y los grandes modelos de lenguaje (Chat GPT-4) imitadores del comportamiento humano y, además, revisan e interpretan informaciones extensas de libros, páginas web, transcripciones de videos y publicaciones en redes sociales, brindando acceso a una cantidad de lenguajes que cualquier persona necesitaría, para absorberlos, varias vidas. El ritmo extremadamente rápido del cambio tecnológico que Anderson desarrolla en su obra, lo toca de modo preciso al expresar que “Cuando se lanzó por primera vez en 2018, GPT-1 tenía más de 100 millones de parámetros. Solo un año después, GPT-2 tenía más de 1 mil millones. GPT-3 tenía más de 175 mil millones. GPT-4 probablemente tenía del orden de 1 billón de parámetros” (Anderson Chris. Infectious Generosity- Generosidad Infecciosa, First Editon, 2024).

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