El Instituto contra la Ceguera por Glaucoma (Incocegla) evaluó esta semana a más de 200 menores de edad para detectar posibles casos de ambliopía, también conocida como ojo vago o perezoso.
Las estadísticas mundiales reflejan que la población infantil afectada es de entre el 1% y el 6% de los niños y hasta el 5.49% en el caso de los adultos.
Durante la evaluación, denominada también como celebración del Día A, se realizaron actividades interactivas y charlas educativas, impartidas por los subespecialistas en oftalmología pediátrica y estrabismo. Los participantes se nutrieron de informaciones sobre las causas, síntomas y tratamientos propios de la ambliopía.
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Con esa jornada se buscó educar al público sobre ese padecimiento y resaltar la importancia de las evaluaciones oftalmológicas regulares en los niños.
Las doctoras Haronid Vargas, subdirectora médica del Instituto contra la Ceguera por Glaucoma Santo Domingo; y Laura Dinzey, jefa del departamento de Oftalmología Pediátrica y Estrabismo, explicaron que la jornada se realizó en consonancia con el Consejo Dominicano de Estrabismo y Oftalmología Pediátrica (Codesop) y el Consejo Latinoamericano de Estrabismo (Clade).
La enfermedad
Las médicas señalaron que la ambliopía es una enfermedad visual común en la infancia, que se produce cuando la visión, en uno o ambos ojos, no se desarrolla correctamente.
Resaltaron la importancia de que los niños sean evaluados en los primeros años de la infancia, con miras a que las alternativas de tratamientos correctivos y cirugías sean favorables.
Los datos
Las estadísticas de pacientes atendidos en lo que va del año en el Incocegla reflejan una población de 158,400 pacientes. Se ha detectado una prevalencia general de ambliopía de 0.5%, en la cual el rango de edad con mayor incidencia ha sido de 0 a 8 años, correspondiente a un 2.2% de la población consultada.
Los subespecialistas
Los subespecialistas recomiendan una evaluación y diagnóstico a temprana edad (antes de los siete años), lo que permite que el niño logre una visión normal y sana, debido a que la visión se desarrolla en los primeros años de vida.
Asimismo, la desviación ocular o estrabismo, los defectos refractivos (miopía, hipermetropía y astigmatismo) y opacidades como las cataratas congénitas, pueden ocasionar ambliopía u ojo vago.
Precisaron que se puede lograr un diagnóstico temprano de esa patología.