Garantías para votar

Exhaustiva la consulta, diversas las opiniones, algunas alejadas de las disposiciones legales vigentes y de las posibilidades criollas. “El voto es personal, libre, directo y secreto”. La ley Orgánica de Régimen Electoral 15-19 no prevé voto por correo, voto anticipado o por internet y ordena que las votaciones se efectúen en un solo día. La ausencia de previsión, sin embargo, no afecta la preservación del derecho a elegir y ser elegible. Las elecciones pautadas para celebrarse el 5 de julio ameritan un procedimiento especial que debe ejecutarse antes, durante y después del proceso electoral, debido a la situación especial que la propagación del nuevo coronavirus provoca. El personal de la Junta Central Electoral -JCE- adscrito a la Dirección Nacional de Elecciones, Logística, Informática, Inspectoría, los integrantes de las 158 Juntas Electorales tienen que ser preservados. Los   funcionarios de los colegios electorales, los facilitadores, delegados políticos, miembros de la Policía Militar Electoral, observadores, lejos de convertirse en propagadores del virus, esta vez, además, son guardianes de la salud y de la idoneidad de un proceso con características jamás imaginadas, imponderables. La JCE, antes de dictar la Resolución 53-2020 “Sobre Protocolo para aplicar en los Recintos y Colegios Electorales en las Elecciones Extraordinarias Generales Presidenciales, Senatoriales y de Diputaciones del 5 de Julio 2020” solicitó y evaluó las propuestas tendentes a garantizar la idoneidad sanitaria el día de las elecciones. Estudió las consideraciones del Centro de Asesoría y Promoción Electoral-CAPEL-IIDH- contenidas en el documento “Establecimiento de un Protocolo para la Celebración de Elecciones en el contexto de una Crisis Sanitaria.” Analizó el contenido del “Manual administrativo del proceso de votación y escrutinio en Covid-19” elaborado por la Comisión Nacional Electoral de la República de Corea. El presidente de la JCE, Julio César Castaños Guzmán, participó en el conversatorio virtual organizado por la Organización de Estados Americanos -OEA- “Elecciones en tiempo de Pandemia.” La OEA, luego de la posposición de elecciones en la región, debido a la propagación del virus y los efectos fatales que podría tener una convocatoria electoral sin las debidas precauciones, decidió propiciar el intercambio. En la convocatoria se subrayan las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el reto de realizar elecciones garantizando la protección de la salud. La conducción estuvo a cargo de Gerardo de Icaza Director del Departamento para la Cooperación y Observación Electoral. Durante dos horas Salvador Romero, Presidente del Tribunal Supremo Electoral de Bolivia, Wilfredo Penco, Vicepresidente de la Corte Electoral del Uruguay, Diana Atamaint, Presidenta del Consejo Nacional Electoral del Ecuador, Maria Elena Wapenka, Ministra del Tribunal Superior de Justicia Electoral de Paraguay, expusieron la situación en cada uno de sus países y compartieron las opciones pertinentes para que los procesos electorales, en tiempo de pandemia, puedan celebrarse. Brenda Santamaría, Jefa de Sección- Departamento para la Cooperación y Observación Electoral- compartió las preguntas de los participantes, urbi et orbe. Sin dudas, la manera de enfrentar el desafío inédito requiere prudencia, comprensión, creatividad y acuerdos inviolables. La JCE estudió el documento técnico enviado por la Fundación Internacional para Sistemas Electorales-IFES- “Cuidando la Salud y las Elecciones” y sopesó las recomendaciones depositadas por los representantes de los partidos políticos. Preguntó y recibió respuesta de la Organización Mundial de la Salud y de la Organización Panamericana de la Salud y acatando las prescripciones dispuestas por el Ministerio de Salud y la Comisión de Alto Nivel para la Prevención y Control del Coronavirus COVID-19 el Pleno aprobó el protocolo sanitario que debe ser difundido y conocido por la ciudadanía para su cabal cumplimiento. La JCE asume el compromiso de la desinfección continua, del uso de mascarilla, que ya es obligación en el país. Establece la vigilancia para que luego de votar el abandono del recinto sea inmediato y para mantener el distanciamiento exigido en la fila. Es imprescindible la cooperación, también la responsabilidad colectiva para evitar que 4,168 recintos se conviertan en centros de contagio y propagación del virus, en lugar de espacio para ratificar la democracia.