La oficina del alguacil del condado Hillsborough (costa oeste de Florida) informó este martes que el cuerpo de una mujer que fue hallada muerta en un embalse de la zona presentaba heridas que pueden haber sido causadas por un caimán.

El cadáver fue hallado el domingo por la noche, cuando se festejaba el Día de la Independencia de EE.UU., en un embalse en la localidad de Valrico, en una zona donde existe un restaurante bar.

Todavía no se ha emitido un informe forense sobre la causa de la muerte de la mujer, pero, según la oficina del alguacil, las heridas que presentaba el cuerpo parecen «consistentes con un ataque de caimán».

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De acuerdo al canal Local 10 de Tampa (costa oeste de Florida), la Comisión de Conservación de Vida Silvestre y Pesca de Florida (FWC, en inglés) ha enviado al embalse a uno de sus especialistas en atrapar caimanes, como siempre que ocurre algún incidente en el que estén implicados esos reptiles.

Florida tiene una población de caimanes sana y estable que se calcula en 1,3 millones de ejemplares de todos los tamaños y está repartida por los 67 condados del estado.

“Son una parte importante del ecosistema, pero deben ser tratados con cuidado y respeto”, dice la FWC en su publicación «Consejos para vivir con caimanes».

La agencia estatal autoriza la captura de un caimán solo si mide más de un metro de largo y supone una amenaza para las personas, mascotas o la propiedad.

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Sobre la interacción entre humanos y caimanes, FWC indica que desde 1948 hay más de 20 casos documentados de muerte de personas a causa de ataques de esos reptiles en Florida. Uno de los casos más dramáticos ocurrió en 2016 en un hotel del parque Walt Disney World de Orlando (centro de Florida).

El 14 de junio de ese año el niño Lane Thomas fue arrastrado hasta el agua por un caimán cuando se encontraba con su familia a orillas de un lago artificial en el complejo hotelero Grand Floridian Resort & Spa en Orlando, propiedad de Disney.

Sus padres saltaron al agua y trataron de liberar al niño de las fauces del caimán, de 2 metros de largo, pero no lo consiguieron. El cadáver del menor fue encontrado intacto 16 horas después por submarinistas en el fondo del citado lago.

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A partir de aquel trágico suceso se instalaron cercas metálicas alrededor de lagos y estanques y se colocaron señales para advertir de la presencia de caimanes y del peligro que representan y prohibir el baño en esas aguas.