Porque tiene Covid, el exdirector del Instituto Nacional de Tránsito terrestre (Intrant), Hugo Beras, no compareció ayer por ante el Departamento Investigativo de Crímenes y Delitos de Alta Tecnología, adonde fue citado por el procurador fiscal Rafael Reyes para que responda por la querella que en su contra interpuso el empresario español Carlos Ariel Zabala.

El exfuncionario destituido a raíz del escándalo por las supuestas irregularidades en el proceso de licitación y contrato para el proyecto de semaforización del Gran Santo Domingo, fue citado mediante alguacil para que compareciera a las 10:30 de la mañana. Para justificar su ausencia envió un certificado médico donde consta su afectación por el virus.

Zabala, representante de la empresa Control de Tráfico y Semáfaros (Icontrolt), se querelló contra Hugo Beras por supuesta difamación e injuria, delito tipificado en la Ley número 53-07.

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En octubre pasado el empresario denunció sobre la “licitación fraudulenta” que se habría hecho en el Intrant al calificar a una empresa de carpeta con apenas siete meses de creada, asignándole un trabajo por US$26 millones, labor que según dijo, ya había sido realizada por el Consorcio CMI, del que Icontrolt fue parte.

Según Zabala, el contrato anterior, ganado en el 2019, por USD23 millones, fue anulado por la Dirección de Compras y Contrataciones “sin justificación alguna”, y aún adeudándole parte del dinero.

Se recuerda que el 13 de noviembre la DGCP sometió ante la Procuraduría Anticorrupción (PEPCA) la licitación pública hecha por la gestión de Hugo Beras para el proyecto de semaforización, tras detectar una serie de irregularidades en el contrato firmado con Transcore LATAM, por $1,137 millones.