La usurpación de funciones es uno de los grandes escollos que confrontan los guías turísticos organizados de la República Dominicana ante la mirada indiferente de las autoridades, así como la obsolescencia de la Ley 541, la que urge modificar para adaptarla a las circunstancias actuales.

Así lo expresó Samuel de la Rosa Figueroa, presidente de la Asociación de Guías Turísticos de la República Dominicana, tras participar en una misa en acción de gracias en la Catedral con motivo del 50 aniversario de esa entidad.

Sostuvo que la Ley 541, que rige la actividad turística en la RD, data del año 1969, por lo que hace años quedó atrás ante los grandes avances que ha tenido el sector y el mundo.

Puede leer: Líderes políticos y académicos manifiestan respaldo al discurso de Abinader ante la ONU

Recuerda que cuando se aprobó la citada Ley las actividades económicas eran la caña de azúcar, el cacao, el café y otros rubros, pero a partir de la década de los 90, la principal fuente de ingresos de la nación es el turismo.

Afirma que la incursión de personas no organizadas y sin la preparación correspondiente como guías turísticos constituye un peligro para los visitantes, ya que ante cualquier dificultad no saben hacia dónde acudir.

“No es lo mismo un profesional en el ámbito turístico que un desconocido, en la mayoría de las veces sin la preparación adecuada para fungir como guía, tampoco va a tener el carácter ético y profesional que se requiere”, advierte.

Precisa que el artículo 22 de la Ley 541 establece que toda excursión debe contar con un guía. Sin embargo, la normativa no establece sanciones para los intrusos, que debería consignar en un reglamento que no existe.

Una gran parte de los guías turísticos trabajan por excursiones, pero otros devengan un salario en instituciones estatales y privadas, pero en general son la cara viviente del país ante los turistas que visitan a la nación.

Subrayó la preparación de los guías, no solamente en ámbito turístico, sino también en medicina, psicología, ingeniería, derechos, contabilidad, administración de empresas turísticas y hoteleras, quienes dominan 4 y 5 idiomas.

De la la Rosa expresó que las intervenciones en calles y monumentos en la Ciudad Colonial afectan en el momento su labor, pero a mediano y largo plazo impactaría positivamente, no solamente a los guías sino a todo el país.