La empresaria e “influencer” Kylie Jenner, conocida por ser la hermana más pequeña de la televisiva familia Kardashian, ha vendido una participación mayoritaria de su compañía Kylie Cosmetics, fundada en 2015, por 600 millones de dólares.
Jenner, de 22 años y que había sido hasta ahora propietaria de la totalidad de la empresa, vendió el 51 por ciento a la multinacional de belleza Coty, que es dueña de otras marcas como OPI, Rimmel, GDH, Clairol o Covergirl, según informó el medio especializado Business of Fashion.
Pese a la transacción, Jenner y su equipo continuarán liderando el equipo creativo tanto en el desarrollo de productos como en las iniciativas de comunicación, apunta un comunicado oficial.
“Estoy muy emocionada de aliarme con Coty para seguir llegando a cada vez más fans de Kylie Cosmetics y (la nueva línea) Kylie Skin por todo el mundo”, afirmó la celebridad en el texto.
“Esta colaboración nos permitirá a mí y a mi equipo permanecer centrados en la creación y el desarrollo de cada producto mientras llevamos a la marca a ser una compañía de belleza internacional puntera”, agregó.
Coty, por su parte, espera poder beneficiarse del “gran potencial” de la compañía de Jenner, y además de maquillaje y productos de cuidado facial, se plantea adentrarse en el mercado de las fragancias.
La multinacional hará uso de sus conocimientos globales en investigación y desarrollo, manufactura, distribución y experiencia en el mercado.
Aunque la línea de cuidados faciales de Jenner se lanzó recientemente, en lo que va de año ya ha facturado 25 millones de dólares en ventas, lo que según Coty indica que el éxito de la compañía no da muestras de ralentización.
Jenner fue nombrada en marzo de 2019 la millonaria más joven del mundo por la revista Forbes con una fortuna de 1.000 millones de dólares después de que Kylie Cosmetics empezara a distribuirse en la cadena de productos de belleza Ulta.
Esta operación llevó a que los ingresos de la compañía aumentaran un 9 por ciento el año pasado hasta los 360 millones de dólares, con lo que la empresa alcanzó un valor de 900 millones de dólares, una estimación que Forbes tildó de “conservadora».