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Al mes de abril le persigue una herencia trágica en una buena parte de los países. Ocurre que en sus 30 días calendario estallan acontecimientos sangrientos que enturbian la paz y el sosiego de las sociedades de cada Nación. Son acciones elaboradas por los seres humanos que en su egoísmo solo quieren hacer valer sus ambiciones y aspiraciones de ser los que dominen a los demás.

Parece que al finalizar el periodo festivo de fin de año con las semanas de jolgorio compartido, e inicio del nuevo año, ya se encuentran renovados los planes que han elaborado los humanos para volver de nuevo a su pasatiempo favorito de incordiarse unos con otros. Son los proyectos de las ambiciones y los personales que solo buscan aplastar a los demás en una lucha constante por el sacudirse de la bondad que acarreó la paz del ambiente que acompañan los tiempos invernales, navideños y cuaresmales.

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Pero con la llegada de la primavera es motivo suficiente para enardecer los ánimos que estaban sosegados por el tiempo de armonía que estimula las temperaturas agradables del invierno tropical con ambientes adecuados de amistad y comprensión. Así cuando se llega al mes de abril la sociedad humana se cansa de su pacifismo colectivo y se despiertan como por arte de magia las pasiones y debilidades del espíritu humano y preparados para agredir con palabras y agresiones al prójimo.

Esa es la etapa peligrosa de los abriles cuando las pasiones exaltadas por el cambio ambiental de las festividades en los meses finales del año e inicio del nuevo año que empuja a sacar las pasiones dormidas que estaban latentes en cada miembro de la sociedad para arrollar a los mas débiles y hacerse de un nicho de poder.

Lo anterior es lo que ocurre en el hemisferio norte del planeta, ya que el sur es otro el ambiente por efecto de como se relacionan las estaciones con los habitantes de cada hemisferio. Se sabe que el hemisferio sur va a la zaga del norte. Su desarrollo tiene un desfase increíble en que el norte aplasta al sur con el avance de las civilizaciones asentadas en cada hemisferio.

En consecuencia, el comportamiento de las sociedades humanas del norte y las del sur es peculiar por su proceso de desarrollo con las diferencias abismales de una y de otra gestora de conflictos que han llevado la desolación a muchas sociedades que se ven sumergidas en el caos mortal de los enfrentamientos.

Y los dominicanos no podíamos estar aislados de la conducta de abril de nuestra sociedad. Así vemos como hemos atravesado crisis increíbles en los meses de abril de diversos años específicos llevando inquietudes y luto a los mas variados sectores de nuestra sociedad. Son inolvidables los acontecimientos de abril de 1965 en que la mayor parte de la población actual vivió intensamente esos acontecimientos que culminaron con una ocupación extranjera llevando a un enfrentamiento mortal para luego diluirse en un arreglo de salón dejando a todo el pueblo dominicano ante la expectativa de un conflicto mas prolongado como prueba de la belicosidad latente que albergamos.

Abril está muy unido a la existencia de los dominicanos. Es que son muchos los acontecimientos que han tenido su escenario en ese mes donde el valor y fiereza de los dominicanos se ha puesto de manifiesto para enarbolar los intereses mas disímiles.