La reforma-transformación de la Policía, en sus dos grandes dimensiones, la estructural y la educativa, requiere de una gran cantidad de recursos: financieros, técnicos, equipamiento e infraestructura.
El Gobierno central ha ofrecido su apoyo económico, pero no puede solo. Por esta razón se han tocado las puertas de organismos nacionales e internacionales.
A nivel nacional, hemos recibido financiamiento directo de las siguientes instituciones:
- Sector público:
• Ministerio de Educación (MINERD) nos ha donado más de mil computadoras, mobiliario para las aulas de la nueva escuela en Río San Juan y otros equipos didácticos.
• Ministerio de Educación Superior, Ciencia y Tecnología (MESCYT). Apoyó financieramente para iniciar la primera maestría del IPES en materia de seguridad.
• Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC). Construyó el nuevo edificio del IPES para alojar las oficinas de los principales ejecutivos, por un costo superior a los 150 millones de pesos, y está ubicado en la Plaza Educativa, sito avenida Abraham Lincoln esquina avenida Independencia.
• Fundación Banreservas. Nos donó todo el mobiliario para el nuevo edificio y nos apoyó también para dotar de la tecnología necesaria para la nueva edificación.
• Ministerio de la Vivienda y Edificaciones (MIVED). Además de las ayudas que está ofreciendo directamente a la Policía Nacional aportando viviendas para los policías más necesitados, nos prometió construir una edificación de 23 aulas que iniciaría este año 2023. - Sector privado:
• A través del Fideicomiso privado, los empresarios han apoyado diferentes iniciativas del programa educativo: han financiado una parte de los cursos complementarios.
• Han financiado los consultores que están trabajando en la propuesta del nuevo IPES, que implica: nuevo modelo educativo, reestructuración de la estructura organizacional, nuevo modelo de infraestructura física y tecnológica y normativas adecuadas a los cambios.
A nivel internacional hemos recibido ayuda de varias agencias: - Pan American Development Foundation (PADF).
Esta organización gubernamental nos ha apoyado en dos direcciones:
a. Formando a los docentes del IPES. Ya se hizo el primer curso sobre cómo realizar programas de clases en base al esquema de competencias. En octubre se continuará con otros cursos formativos para docentes.
b. Financiamiento de viajes internacionales: financiamiento de 10 personas para visitar la experiencia de Honduras; participación en eventos en Bogotá; y viaje a Orlando para conocer las escuelas de policías de ese lugar. Se están trabajando otros proyectos con ellos, también en materia de formación que serán dirigidos a oficiales subalternos. - USAID. Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional. Nos ha apoyado con la consultoría del general retirado Luis García, uno de los actores claves de la reforma educativa de Colombia. Es importante que unos ojos externos evalúen lo que estamos haciendo y nos haga las recomendaciones de lugar.
- La Oficina Internacional de Asistencia Antinarcóticos y Cumplimiento de la Ley (INL). Sin lugar a duda, esta es la agencia que más ha colaborado con el proceso.
a. Desde hace algunos años tienen el llamado Plan Triangular (Colombia-Estados Unidos-República Dominicana) que se dedica a la formación. En el marco de este proceso se ha adecuado a las exigencias de la reforma y transformación. Por ejemplo, el último curso que se impartió a más de 400 coroneles y generales fue sobre el nuevo liderazgo policial, impartido por policías de Colombia.
b. Nos financió una encuesta con la empresa Gallup a fin de conocer la opinión de los usuarios del IPE. Los resultados que arrojó fueron muy interesantes.
c. Nos donó en especie un valor de un millón de dólares para mejorar las condiciones de equipamiento para los conscriptos de Hatillo y para ser utilizados en Boca Chica, una vez se adecúen esas instalaciones cedidas por la Armada de República Dominicana (ARD).
Todas estas ayudas se inscriben en el marco del programa general. Hemos estado buscando recursos hasta por debajo de las piedras. Una transformación policial amerita un profundo cambio cultural en todos sus miembros, el cual, como se sabe, no puede producirse de la noche a la mañana. Pero, y esto es importante, paralelamente con la nueva visión, la nueva doctrina policial que necesita ser escrita y definida, debe producirse mejoramiento de las condiciones físicas en todos los niveles.
Por esta razón, los miembros de los diferentes organismos que componen la parte educativa, además de los cambios curriculares, hemos procurado poner atención en el mejoramiento de las condiciones físicas del organismo. Esta parte es un peldaño en el largo proceso que requiere una verdadera transformación de la Policía Nacional, un organismo fundado bajo el régimen de Trujillo, con una visión vertical y militar, cuya función no era el proteger a la ciudadanía, sino someterla al silencio requerido por el dictador. Se requiere tiempo y mucho esfuerzo para hacer ese cambio.