La sombrilla amarilla estará muy abierta

La sombrilla amarilla estará muy abierta

Marien Aristy Capitán

Amplia, la sombrilla amarilla ha vuelto a abrirse. Ante el riesgo de que desaparezca la inversión del 4% del Producto Interno Bruto (PIB) en el Ministerio de Educación, la sociedad recordó una lucha que jamás debió estacionar: de tan confiados, no sabemos qué ha pasado.

La duda en torno a la calidad del gasto, así como un alegado recorte en la ejecución del presupuesto, son los argumentos que esgrimen hoy los antiguos paladines del 4% para incumplir una ley en la que ellos creían antes de llegar al Gobierno.

Puede leer: Ay, RD, que futuro tan incierto

Sorprende que, a pesar de ser firmante del Pacto Nacional para la Reforma Educativa y de haber anunciado con bombos y platillos el plan del Ministerio de Educación 2021-2024, el presidente Luis Abinader haya permitido que se pensara desviar el dinero de la cartera: el pacto es un compromiso de inversión, mientras el plan debe establecer en qué se va a invertir.

Hay que tener timbales de acero para decirle a otros que busquen en qué invertir los RD$4,250 millones que le “sobran” a Educación porque no hay en qué gastarlos. ¿Y los talleristas de la tanda extendida, el inglés y las escuelas y politécnicos a medio talle? Está pendiente, además, que las aulas sean inclusivas, sostenibles y seguras, plan que requiere los RD$1,831 millones que le darían a la Diecom. ¡En qué gastar hay!