La Procuradora General de la República, Miriam Germán Brito, sostuvo un encuentro de trabajo con parte del equipo que acompañará su gestión desde las distintas áreas que maneja su despacho, con miras a garantizar la operatividad y el óptimo desempeño de todas las dependencias bajo su responsabilidad.
La procuradora General de la República, Miriam Germán Brito, dejó ayer claro que durante su gestión al frente del Ministerio Público no se tolerarán la corrupción, el narcotráfico ni ningún otro delito y que “tampoco trataremos a los procesados con paños tibios”.
Germán Brito aseguró que para tal fin “las investigaciones se harán a profundidad, teniendo como norte aportar pruebas a los tribunales que, por haber sido recabadas sin violar derechos y apegadas a la ley, podrán sustentar una sanción que soporte cualquier escrutinio que ejerzan los procesados a través de los recursos legales a su disposición”.
Enfatizó que los ejes de su trabajo serán la transparencia, la cero impunidad y la intolerancia ante los abusos de derecho.
Acercar MP a la ciudadanía. En una reunión con parte de su equipo, la procuradora General de la República instruyó a todos los servidores de la dependencia que dirige a ponerse al servicio de la población con el objetivo de reconectar la función del MP con la ciudadanía.
“Todos tenemos la misión de reconectar a la Procuraduría General, a las procuradurías de cortes, a las fiscalías y a todas las áreas del Ministerio Público con el ciudadano y la ciudadana. Somos, como Ministerio Público, su puerta de entrada al sistema de justicia y debemos velar por la preservación de su integridad, sus bienes y sus derechos”, externó.
La jefa del órgano persecutor instruyó a todo el personal del Ministerio Público a proceder siempre teniendo en cuenta los derechos que el Código Procesal Penal prevé para las víctimas.
Germán Brito recordó que a todos los ciudadanos, aún a los perseguidos por el sistema de justicia, debe preservárseles su integridad personal y sus derechos mientras el Ministerio Público gestiona, con el aporte de pruebas sustentadas, que se les aplique todo el peso de la ley conforme a la gravedad de sus actos.