El obispo de la Diócesis Nuestra Señora de la Altagracia en Higüey, monseñor Jesús Castro Marte, pidió ayer al Gobierno aplicar políticas públicas que contribuyan con los más necesitados del país, ante los altos precios de los productos de la canasta básica familiar.
“Hay que meterle el diente a los precios de los productos de primera necesidad, porque los pobres son los que sufren; ellos no entienden sobre los precios internacionales o que el petróleo subió, ellos lo que entienden es que el arroz, la habichuela y la carne lleguen con facilidad”, dijo el obispo.
Monseñor reconoce que las alzas que experimentan los precios de los combustibles y los alimentos no dependen del país, sino de factores externos. Dijo que el mundo lleva dos años con una pandemia que ha provocado que los países pasen momentos muy difíciles.
El obispo ofreció declaraciones a la prensa durante una visita al Consejo de Desarrollo Estratégico de Santiago (CDES), donde se reunió con sus principales ejecutivos para dialogar sobre los logros, pasos, enseñanzas, aprendidas y errores al formular el Plan Estratégico de Desarrollo Territorial de Santiago, que son clave para la provincia La Altagracia.
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“Siempre es bueno escuchar y evidenciar la experiencia, porque aquí han formado un plan estratégico que ha dado resultado positivo para Santiago y la región norte”, explicó.
Señaló que los planes que tienen para la provincia La Altagracia es que pase de la economía doméstica a la empresarial como ha ocurrido con Santiago, para lo cual entiende es importante la organización y el trabajo mancomunado de todos los sectores.
El director ejecutivo del CDES, Reynaldo Peguero, tras ofrecer la bienvenida al líder religioso, informó que el prelado quiso conocer de primera mano los pasos de cómo replicar o hacer el plan estratégico de la provincia La Altagracia.
Optimista por discurso
Monseñor se mostró esperanzado en el discurso de rendición de cuentas del presidente Luis Abinader el próximo 27 de febrero. “Pienso que el gobierno traerá esperanza al pueblo dominicano, propuestas concretas y esperamos planes de mejoras para el país, ojalá que sea así”, indicó.
Ante el conflicto Ucrania-Rusia, el obispo dijo que este tipo de acontecimiento afecta a los países en materia económica y lamentó que en la mayoría de las ocasiones se producen por intereses particulares.
Sostuvo que una guerra trae conflicto en todo el mundo, siendo las personas las más afectadas.