José Alfredo Espinal 
Monseñor Thomas Morel Diplan obispo auxiliar de la arquidiócesis de Santiago. Hoy/ Wilson Aracena
SANTIAGO. – El obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Santiago, monseñor Carlos Tomás Morel Diplán, pidió a las autoridades del Ministerio de Educación dejar sin efecto el retorno a la semipresencialidad y, en cambio, propuso terminar el presente año escolar de manera virtual debido al rebrote del covid-19 en el país.
“Nunca se debió llamar a una convocatoria para el inicio de las clases semipresencial por la situación que tenemos. Se debe cuidar la salud de los adultos y los niños, estos últimos tampoco están exentos de la enfermedad”, manifestó.
El líder religioso recomendó que el presente año escolar concluya de manera virtual y que, si existen las condiciones, la semipresencialidad pueda retornar a partir del mes de septiembre.
Monseñor Morel Diplán dijo que las autoridades educativas deben ir pensando en el montaje del nuevo año escolar, preparando a los centros educativos, al personal docente y administrativo.
El obispo entiende que las instituciones y las empresas deben exigirles la vacunación a todos los empleados, pero que la medida que pudieran adoptar no se vea como una obligación compulsiva.
“Las medidas son para prevención, es para controlar y prevenir el covid-19. Creo que todas las provincias deben ser sometidas al mismo rigor de aislamiento manteniendo el control”, indicó el prelado luego de participar de la misa de Corpus Christi que presidió el arzobispo metropolitano Freddy Bretón.
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Monseñor Morel Diplán manifestó que la población debe ser obediente y responsable para acudir al llamado a vacunarse contra el virus.
Dijo que la Iglesia Católica ha cumplido con el protocolo establecido por las autoridades del Ministerio de Salud Pública durante toda la pandemia, con distanciamiento físico, lavado de manos y uso de mascarillas.
Sostuvo que no se tiene contemplado exigirle a la feligresía tarjeta de vacunación, tras considerar que es un deber de cada ciudadano inocularse, además de que las entradas a los templos están limitadas.
