WASHINGTON. La Tierra está perdiendo plantas, animales y agua limpia a una velocidad drástica, advirtió la ONU en cuatro reportes sobre la biodiversidad.
Científicos reunidos en Colombia publicaron los reportes regionales el viernes sobre el estado de plantas y animales en América, Europa y Asia Central, África y el área Asia-Pacífico. La conclusión luego de tres años de estudio: Ninguna zona está bien.
El trabajo no es solamente sobre los animales, dijo el jefe del equipo de estudios, Robert Watson. Se trata de mantener la Tierra vivible para los humanos, porque dependemos de la biodiversidad para comer y para tener agua potable y salud pública, dijo el prominente científico.
«Esto está minando el bienestar en todo el planeta, amenazándonos a largo plazo en términos de alimentos y agua», dijo Watson en una entrevista. Lo que está sucediendo es un efecto secundario del mundo mientras se vuelve más acaudalado y poblado, dijo. Los humanos necesitan más alimentos, más agua limpia, más energía y más tierra. Y la forma en que la sociedad ha tratado de lograrlo ha sido reduciendo la biodiversidad, agregó.
Hábitats cruciales han sido destruidos, especies extrañas han invadido lugares, substancias químicas han dañado plantas y animales, pantanos y manglares que limpian la contaminación están desapareciendo y las aguas del mundo son afectadas por pesca excesiva, dijo.
Watson indicó que los cambios climáticos causados por el hombre están empeorando y que el calentamiento global muy pronto dañará la biodiversidad tanto como el resto de los otros problemas combinados.
Los reportes proyectan que, si las tendencias actuales continúan: Para 2050 América tendrá 15% menos plantas y animales que ahora. Para 2048 Asia no tendrá reservas para pesca comercial. Más de una cuarta parte de las especies que viven solamente en Europa están amenazadas ahora.
África podría perder la mitad de algunas especies de mamíferos y aves para 2100. El panorama es sombrío si la sociedad no cambia, pero aún puede hacerlo, aseguró Watson. «Algunas especies están amenazadas de extinción.
En otras, los números van a caer», dijo. «Va a ser un lugar más solitario en nuestro mundo natural. Es un asunto moral ¿Tenemos derecho los humanos a causar su extinción?».