Los partidos Fuerza del Pueblo (FP) y de la Liberación Dominicana (PLD) acudieron a la Asamblea Nacional Revisora de la Constitución para votar en contra de la modificación de la Carta Magna, al reiterar que se trata de “un capricho” del presidente Luis Abinader que nada aporta a la institucionalidad democrática de la nación.

El vocero del bloque de diputados de la FP, Rafael Castillo, manifestó que no forman parte de la reforma, porque no llena siquiera el requisito de “parche”.

Debido a esa situación, apuntó, los legisladores de la organización opositora se negaron a opinar sobre la modificación de artículos y a dar su versión en la Asamblea.

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El senador por el Distrito Nacional de la FP, Omar Fernández, sostuvo que la posición de esa organización es que la Constitución se mantenga tal como se votó en 2010, porque la reforma actual no aporta nada nuevo al texto sustantivo.

Deploró la forma atropellada con que el oficialismo desarrolla la reforma, en contra de la tranquilidad y solemnidad que amerita el tema.

Definió como insólito que, al mismo tiempo que se reúne la Asamblea Nacional Revisora, el presidente de la República encabece un acto para presentar el proyecto de reforma fiscal, del que dijo, afectaría a la mayoría de la gente.

Gustavo Sánchez, vocero del bloque de diputados del PLD, insistió en que la presentación del proyecto de reforma constitucional era el preludio para introducir el paquetazo fiscal que, a su juicio, indica afectará a los sectores de clase media y baja. Expresó que por eso el PLD vota en contra, al indicar que no es más que un caramelo para entretenerlos, mientras por debajo, afirma, introducen la reforma fiscal.

Calificó la propuesta como un “atraco” a los bolsillos de los dominicanos, que ahora verán disminuir notablemente su poder adquisitivo.

Asisten a la asamblea por formalismo, ya que su voz no es oída.