El Partido Revolucionario Social Demócrata (PRSD) consideró que, para salir airoso de la presente crisis sanitaria, el Gobierno debe hacer una reorientación del gasto público, bajando a la mitad los salarios de los altos funcionarios, eliminando las botellas en las oficinas del Estado y el cofrecito y el barrilito en el Congreso Nacional.

Juan Estévez, secretario general del PRSD, consideró que el Gobierno está usando la crisis sanitaria con fines políticos y condicionó el apoyo de esa organización a la extensión por más de 15 días del estado de emergencia a que las autoridades tomen medidas claras para detener el crecimiento del coronavirus en el territorio dominicano.

El alto dirigente político consideró imprescindible que el Gobierno detenga la malversación de los recursos públicos y enfrente la corrupción administrativa.

“Solo tomando esas medidas el Gobierno podrá disponer de los recursos suficientes para asistir económicamente a los sectores informales de la economía dominicana y a las medianas, pequeñas y micro empresas, durante y después de la pandemia del coronavirus”, manifestó.

Estévez propuso, además, el incremento a RD$10,000 mensuales el subsidio solidario a los trabajadores suspendidos y a los desempleados.

“Ahora más que nunca el Gobierno está obligado a una profunda reorientación de sus gastos”, dijo.

Asimismo, pidió a las autoridades “detener el uso politiquero que le está dando a la crisis sanitaria, permitiendo que su candidato viole el toque de queda y el distanciamiento social para parecer que salva la situación, que debe atender el Gobierno”.

El secretario general del PRSD propuso, también, que el Gobierno convoque de inmediato al liderazgo nacional para concertar un plan definitivo que ayude a enfrentar a fondo la pandemia para preservar la vida y la salud de la población

Igualmente, que coordine con el sector empresarial la progresiva reactivación de la economía nacional y elabore una intensa campaña nacional de concientización a la población sobre la necesidad de contener la pandemia, aplicando las máximas medidas de preservación individual y social.

“Es imprescindible que, definitivamente, se dote a los hospitales y al personal sanitario de todos los equipos médicos, los medicamentos, y las pruebas de detección del COVID-19”, precisó.