El diputado nacional por el Frente Amplio, Juan Dionicio Rodríguez Restituyo, junto a un grupo de legisladores de la Cámara de Diputados, depositaron un ante proyecto de Ley denominado “Ley Orgánica de la Administración Local y Régimen Territorial”, que sustituye por completo la Ley 176-07 del Distrito Nacional y los Municipios.

Rodríguez Restituyo aseveró que esta iniciativa procura poner la administración local y territorial en sintonía con el mandato de la Constitución del 2015, que establece unos principios y plantea el régimen de los municipios como parte de ese ordenamiento unitario de Gobierno de la Nación, expresados como los distintos niveles de gobierno, entes y órganos, quienes tienen la obligación de observar la unidad del ordenamiento jurídico, la unidad territorial, y la universalidad en la igualdad de trato como expresión de la soberanía del pueblo dominicano.

‘’Este Proyecto plantea además de la cohesión social, la equidad territorial y la participación social, esta última como un derecho cuya titularidad y ejercicio corresponden a la ciudadanía, la igualdad de oportunidades y el acceso a los servicios públicos por parte de la población y la responsabilidad obligatoria del gobierno de la nación de garantizar esos derechos mediante la elaboración, adopción y ejecución de planes, políticas, programas y proyectos públicos para la aplicación del presupuesto participativo municipal’’, aseguró el legislador.

El ante proyecto de más de 300 artículos, fue una elaboración fruto de una amplia discusión de diversos sectores nacionales y prácticamente todas las instituciones municipales y distritales, así como expertos nacionales, dentro de los que se puede mencionar a Pedro Hernández, Faustino Collado, Juan Luis Corporán, Domingo Contreras, Domingo Matías, Virtudes Álvarez, y otros.

El Diputado Proponente, que también fue regidor del Ayuntamiento del Distrito Nacional, señaló que con esta propuesta de ley, “entraremos a un régimen de descentralización real, volvemos al pensamiento Duartiano de la nación, donde el poder municipal es el principal del Estado, pero sobre todo, se crea un régimen de consecuencia para que el ejercicio y desarrollo local se convierta definitivamente en la punta de lanza para que la República Dominicana, desde lo local, dé el salto hacia el Progreso.