La pedofilia es una patología de alto riesgo que debería ser castigada en el país con la castración química, afirmó el doctor Rafael García Álvarez, psiquiatra y terapeuta sexual que explica que, con ese tipo de intervención médica, se bloquea el impulso sexual de individuos que no tienen control sobre sus deseos.
“El pedófilo no tiene freno, no tiene control del impulso sexual, y por eso el impulso hay que bloquearlo, porque se convierte en un riesgo. En Estados Unidos estos individuos deben decir dónde se mudan y a ese barrio hay que informarle que hay un pedófilo. Pero eso aquí no ha ocurrido porque todavía nosotros tenemos una serie de prejuicios con ese tema”.
Con relación a las razones que llevan a un hombre a desear sexualmente a niñas, el doctor García Álvarez explicó que se trata de una patología muy peligrosa, porque mientras menos edad tienen más las desean.
“Entonces tenemos que el abuso sexual ocurre en su mayoría entre los cuatro, cinco y seis años. Estos sujetos abordan a estas niñas, muchas veces son conocidos en la familia, de confianza, y sin embargo violentan toda esa confianza que se les da.
“Es más, hay asociaciones de pedófilos que lo que plantean es que hay que legalizar la pedofilia porque las niñas tienen derecho a sentir placer, pero con ese argumento lo que en realidad andan buscando es ese tipo de sensaciones nuevas, pero muy enfermas”.
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El horror del incesto
El doctor García Álvarez planteó que para los terapeutas sexuales es preocupante la incidencia del incesto en el país, y en ese sentido expresó que las estadísticas oficiales muestran una tendencia hacia el aumento.
“Hoy día sabemos que la mayoría de los abusos sexuales son perpetrados por familiares o personas muy cercanas a la familia, y que el incesto en nuestro medio sigue siendo muy preocupante.
“Las estadísticas de la Procuraduría General de la República indican que Santo Domingo Este tiene más incestos que violaciones. El año pasado reportaron 96 casos de incesto y 90 de violaciones”.
Para el experto, quien es fundador del Instituto de Sexualidad Humana de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), los padres que violan a sus propios hijos son personas que han perdido totalmente la perspectiva del rol que tienen por delante.
Esas personas, explicó, se sienten atraídos por sus hijos, sobre todo por las niñas, y violan todas las fronteras aprovechándose de la fusión emocional que existe entre padre e hija.
Violación de adolescentes
El especialista se refirió además a un tema históricamente normalizado en la sociedad dominicana, pero que es lesivo para la salud emocional de las víctimas.
Se trata de la relación sexual de adultos con adolescentes, lo que considera una violación aunque se le ponga el disfraz de un hecho consensuado.
“Si usted se acostó con una menor usted la violó, porque el adolescente, menor de 18 años, no tiene edad para consentir, entonces no importa lo que la adolescente diga, usted utilizó su influencia para cometer ese delito”.
A juicio del doctor García Álvarez ese tema no se ha controlado en el país, como tampoco en el embarazo de adolescentes, porque no se aplica la ley.
Respecto al daño emocional que deja en la adolescente la relación sexual con el adulto explicó que, “si no fue consentida”, el daño es mayor porque sentirá el peso de la violación.
“Y si fue seducida, que generalmente ocurre más por seducción, le hacen regalos, le brindan cosas, le dan dinero, todo eso va derrumbando la posible resistencia de la adolescente que cae en las garras de estos depredadores, estos individuos son depredadores, destructores, peligrosos”.
Cuidado con las personas cercanas
La confianza
- El doctor Rafael García Álvarez reitera que, como ya es sabido, las violaciones sexuales contra menores de edad las cometen, en la mayoría de los casos, personas cercanas al entono familiar, razón por la cual los padres deben estar siempre vigilantes.
- Los pedófilos son personas peligrosas, porque violan todas las fronteras con el objetivo de satisfacer sus deseos sexuales.
- Esas personas llegan al extremo de plantear que los menores de edad tienen derecho a sentir placer a través del sexo,