Con el inicio el pasado fin de semana de las ligas Serie A de Italia y LaLiga de España, las cinco principales del continente europeo han arrancado, al igual que las de los demás países que lo hicieron en fechas anteriores. Abren un campeonato que será atípico, accidentado por la celebración del Mundial de Fútbol en fecha no veraniega como siempre ha sido habitual: Catar 2022 se jugará entre el 20 (ya no el 21) de noviembre y el 18 de diciembre.
En vista de este parón en medio de temporada, los jugadores deberán estar disponibles para sus selecciones por lo menos el día 13 de noviembre apenas una semana antes) y regresarán a sus respectivos clubes pasada la fecha de Navidad.
Esta situación del parón en medio de la temporada no ha sido del agrado de los entrenadores, y mucho menos de los jugadores que accionarán en el Mundial. Y a la vez, ha obligado a las ligas hacer ajustes en los calendarios que fueron adelantados a la habitual fecha de inicio, lo que obligó a los equipos a tener una pretemporada más corta.
En los próximos tres meses los jugadores tendrán una carga fuerte de partidos. Hasta antes del Mundial se jugarán entre 14 y 16 fechas de las ligas, que se detendrán recién después del fin de semana del 13 de noviembre (España el 9 de noviembre). Y a esto se suman los encuentros correspondientes a las copas nacionales y las seis jornadas de la fase de grupos de los torneos europeo: Champions League, Europa League y Conference League.
Todo esto produce preocupaciones en los entrenadores, tanto de los clubes como de las selecciones, porque podrían acarrear jugadores con serias lesiones.