El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha dado negativo en COVID-19 y no es contagioso, informó este lunes su médico en la Casa Blanca, Sean Conley.
En un memorándum difundido por la Casa Blanca poco antes de que Trump participe en un mitin en Sanford, en el centro de Florida, Conley señaló que el presidente «ha dado NEGATIVO, en días consecutivos, usando la tarjeta para antígeno Abbott BinaxNOW».
Conley indicó que esa prueba «no se utilizó de forma aislada para determinar el actual estado negativo del presidente».
El galeno detalló que además se tomaron en cuenta «datos clínicos y de laboratorio adicionales, incluyendo la carga viral, el ARN subgenómico y las mediciones de umbral del ciclo de PCR, así como la evaluación en curso de los datos de cultivo viral, que, aseguró, «indican una falta de replicación viral detectable».
El especialista agregó que el «presidente no es infeccioso para los demás», citando los «datos completos» de la evaluación de Trump y de acuerdo con las pautas de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés).
En agosto pasado, la Administración de Alimentos y Medicamentos de los EE.UU. (FDA, por sus siglas en inglés) emitió una autorización de uso de emergencia a Abbott Diagnostics Scarboroug para su tarjeta BinaxNOW COVID-19 Ag.
El informe médico se dio a conocer cuando Trump ha convocado a un mitin Florida, una semana después de que abandonara el hospital militar Walter Reed y tras un primer acto público con simpatizantes efectuado el sábado en un balcón de la Casa Blanca luego de contraer la enfermedad.
«Nos vemos en Sanford, Florida, esta noche para un gran mitin», escribió esta mañana el mandatario en su cuenta de Twitter.
El domingo, Trump dijo a la cadena Fox el domingo de que es «inmune» al coronavirus, más de una semana después de que diera positivo por COVID-19, y señaló que está «en muy buena forma para pelear las batallas».
Tras el mitin de Florida, el gobernante tiene previsto esta semana otros actos de campaña en los estados de Pennsylvania y Iowa, con los que pretende ganar terreno, a tenor de lo que reflejan las últimas encuestas que dan una ventaja a su rival demócrata, el exvicepresidente Joe Biden.