Olga Vergés 
La tradición de las festividades navideñas se ha visto empañada por los constantes actos proselitistas realizados en provincias y sectores populares del Gran Santo Domingo y el Distrito Nacional, provocando malestar e intranquilidad en los hogares dominicanos.
Las barriadas Ensanche La Fe, Villas Agrícolas, Villa Consuelo, San Carlos, Gualey, Villa Juana y Simón Bolívar, así como también, Santo Domingo Este, y Santo Domingo Oeste son los más perjudicados. Según sus moradores, los políticos, sin excepción de color de su partido, no tienen días ni horas, provocando largos entaponamientos y contaminación sonora.
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“Este es un tiempo para estar en recogimiento con tu familia disfrutando en paz, y que todos los partidos, sin excepción, utilicen la Navidad para estar en campañas es simplemente desagradable y una falta de respeto”, expresó María Cuevas, residente en Villas Agrícolas.
En ese tenor, Jazmín Rojas, residente en Santo Domingo Este, dijo que el incremento de las caravanas durante los fines de semana es desmedido y sin consecuencias por los organismos de seguridad. “ Llamar al 911, o a la Policía Nacional es una perdida de tiempo, ya que muchas veces están presentes y no hacen nada al respecto, las leyes simplemente son ignoradas”, manifestó.
Otros entienden que las tradiciones navideñas, poco a poco se están perdiendo, ya que las figuras que deben velar por el orden y seguridad no predican con el ejemplo según Mario Méndez, residente en el Ensanche La Fe. En el mismo sector Geovanny Jiménez, narra lo incómodo de no poder descansar por el constante ruido de las caravanas políticas.
David Valero y Danny González, entienden que las festividades navideñas están estrechamente ligadas a la política por las ayudas sociales que se les entrega a algunos ciudadanos razón por la cual son aprovechadas por los políticos en actos proselitistas.
