Consultorio Ecológico

P. Profesor,¿nos deja alguna lección el accidente provocado por una grancera a la tubería matriz del acueducto Valdesia – Santo Domingo, que puso en peligro el suministro de agua potable a media capital?

R. Claro que sí. Toda la zona de remanso del Río Haina fue protegida por el Decreto N° 138-96, como uno de los últimos actos del Presidente Balaguer para reforzar la protección efectiva del Cinturón Verde de Santo Domingo, zona ambiental “A” (Decreto N° 183-93), por considerarse “zona vital para el suministro de agua de calidad de Santo Domingo”.
Y si existe una normativa legal sobre otra de cardinal importancia y ambas se violan olímpicamente por parte de las granceras y las autoridades lucen desconocerlas o se hacen las desentendidas, pues es lógico que ocurran cosas como ésta. El tramo del río Haina que discurre entre la Boca de Los Montones y su desembocadura en Los Bajos de Haina, es una zona de desbordamiento o deposición histórica de áridos.
Esa gran llanura ribereña protegida por el Cinturón Verde, tiene una importancia trascendental para el suministro de agua potable a la capital dominicana por dos razones primarias. Primero, allí existe la mayor concentración de pozos de agua del entorno de Santo Domingo y segundo, por ese lugar pasa la tubería matriz del Acueducto Valdesia – Santo Domingo, el más grande e importante del país.
Permitir que una empresa minera no metálica o de extracción y comercialización de agregados establezca sus instalaciones ilegalmente sobre la doble línea de tuberías que abastecen el principal asentamiento humano de la República Dominicana, no solo es una insensatez, si no, una verdadera afrenta a la sociedad dominicana.
Como conocedor del problema y del conflicto interminable de la extracción de agregados desde Quita Sueño, El Carril, Manoguayabo, Batey Bienvenido, Buenas Noches, Batey Palavé, Lechería, Hato Nuevo y zonas aledañas y contestes con la importancia de los 17 pozos de extracción de agua potable, la gran Planta de Tratamiento de Agua Potable de Manoguayabo; sugerimos a las autoridades del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo y al Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, declarar “Zona Estratégica para el Suministro de Agua Potable de la Capital Dominicana”.
Pero no solo con una simple resolución, porque sistemáticamente se han desconocido iniciativas similares, sino, con una estructura de control y vigilancia militar bajo el mando de un oficial mayor.