Todavía no había cumplido 24 años cuando Frank Rainieri decidió convertir a Punta Cana en un gran destino turístico. Hoy, 35 años después, en una zona que aglutina un total de 20,000 habitaciones, el presidente de una compañía de vanguardia en el sector turístico, hace balance y habla de los proyectos del Grupo Punta Cana para los próximos años.

El balance es más que positivo. A pesar de todo, dice Rainieri. «A pesar de los errores que cometen nuestros gobiernos. De las leyes ahora previstas que frenarían el desarrollo del sector exportador, que es el más dinámico de la economía y el más importante».

Es una historia jalonada de éxitos; pero de éxitos que han tenido que sobreponerse a las dificultades impuestas por las autoridades de todas las épocas. «Lamentablemente en múltiples ocasiones hemos vivido ese tipo de errores que comenten los gobiernos. Cuando comenzamos, no quisieron reconocernos como proyecto turístico y no recibimos incentivos, ni préstamos de Infratur, porque simplemente estábamos desarrollando un área que no era la que al gobierno de turno le interesaba. Más tarde, sufrimos Operación Duarte sin ningún resultado. Fuimos penalizados en múltiples ocasiones». Sin embargo, el optimismo y la persistencia han caracterizado todos los propósitos del Grupo. «Somos de los que creemos que el país económico se impondrá sobre el país político. Y sólo en ese momento habrá un crecimiento real y permanente en la vida nacional».

La palabra satisfacción es la que más resuena durante la conversación con el presidente de la compañía. Por muchas cosas. «Por ser los pioneros en el desarrollo del destino turístico más importante del Caribe. Por proyectar el primer aeropuerto internacional del mundo diseñado, construido y operado por una empresa privada, y que hoy constituye el motor del desarrollo de la región».

«Pero nuestra mayor satisfacción continúa Frank Rainieri es sin embargo que ese polo turístico hoy genera más del 25% de las divisas del país. Y da empleo a más de 35,000 personas, lo que han convertido a la provincia de la Altagracia en la de mayor ingreso por familia y la única que no tiene desempleo. Eso es más importante que cualquier logro material personal».

Otro aspecto que subraya el directivo del Grupo Punta Cana es que han sido distinguidos internacionalmente por sus programas ecológicos y su respeto al medio ambiente. La compañía tiene una fundación ecológica, una reserva ecológica, con un sendero para el uso del turismo, y opera un laboratorio de biodiversidad junto a la Universidad Cornell, de Estados Unidos.

También destaca la labor social de la compañía con la construcción de viviendas para los empleados y una escuela modelo con más de 250 alumnos para sus hijos, donde los padres pagan de acuerdo a lo que ganan. (Para febrero está prevista la construcción de un liceo para 400 alumnos en Verón).

«Nuestra empresa se ha basado en el trabajo, la transparencia, la honestidad. Todos los vendavales circunstanciales no nos quitan el sueño y vemos con optimismo el desarrollo», puntualiza Rainieri.

[b]INICIOS[/b]

¿Dónde y cómo comenzó todo esto? «En los años 60 comencé con un negocio agrícola con dos amigos. Entonces un grupo norteamericano compró esas tierras sin conocerlas, sin saber que era un selva adonde sólo se llegaba en helicóptero. No sabían qué hacer y me pidieron que los ayudara. Nunca había participado en nada turístico. En ese momento estaba a punto de cumplir los 24 años. Y les dije que sí, porque había leído que en México un lugar de playa donde se iba a filmar una película se iba a convertir en un destino turístico. El sitio era Puerto Vallarta; la película, «La noche de la iguana» y los actores Richard Burton y Elisabeth Taylor».

«Con la osadía que da la juventud prosigue el empresario , yo dije que iba a hacer eso en ese lugar que entonces se llamaba Yauya o Punta Borrachón., nombre que cambié por el de Punta Cana en 1970. Los norteamericanos primero hablaron de cortar el bosque para exportar madera, después de exportar arena blanda hacia PR para usarla como pañete de construcción, todo insólito. Los convencí de que compráramos un tractor para abrir un camino que nos permitiese llegar hasta allá, después limpiar un área y construir unas cabañitas donde se pudiera pernoctar. Y hacer una pequeña pista de tierra para poder aterrizar en avioneta, ya que el camino se tomaba más de 8 horas de viaje. Y así lo hicimos, sin saber realmente lo que era una empresa turística».

Se comenzó la promoción fuera del país para vender un total 23 habitaciones hoteleras, que llevaban el nombre de Punta Cana Club. «Así estuvimos hasta 1979, cuando nos asociamos con Club Mediterrané. Y después de cinco años y tres gobiernos, logramos que nos permitieran construir el aeropuerto de Punta Cana. Sin él iba a ser imposible el desarrollo de la región».

Inmediatamente se empezó la construcción del Punta Cana Resort, que es hoy el hotel principal. Y comenzó el desarrollo de la región con la llegada de cadenas como Barceló, Riu o Meliá. Hoy la zona cuenta con 20,000 habitaciones hoteleras, cantidad superior a la que tiene la isla de Puerto Rico o la isla de Jamaica entera. Es el destino más grande de todo el Caribe y el segundo si se incluye Centroamérica y México. Sólo Cancún es más grande.

En 1993 se acomete la construcción de La Marina. Y tres años después, entran en el proyecto el modisto Oscar de la Renta y el cantante Julio Iglesias, construyendo allí residencias y pasando a formar parte del accionariado (los socios mayoritarios son Theodore W. Kheel y Rainieri; después Oscar de la Renta y Julio Iglesias y también Bernardo Vega y Manuel José Cabral, entre otros).

Comienza el desarrollo residencial de Punta Cana. «Este es un aspecto sumamente importante para el desarrollo turístico. Una persona con una casa de veraneo gasta mucho más que un turista. Pero los dominicanos no hemos entendido eso».

[b]PLANES DE AMPLIACIÓN[/b]

El grupo está continuamente poniendo en marcha planes de ampliación. Las últimas cifras hablaban de 4,500 millones de pesos en 30 meses (cuando la tasa del dólar aún no se había disparado), pero, para Rainieri, el monto de las inversiones es secundario. «Lo que importa es su efecto en la nación. Lo importante es que ahora en diciembre estamos realizando contratos a unos 300 empleados fijos. Sin mencionar los cientos de empleados que trabajan en las construcciones».

El Grupo ya tiene iniciativas proyectadas hasta 2010. Recientemente se terminaron las Villas Naturaleza, se inauguró una nueva terminal y otro centro comercial. Y para el próximo año está prevista la edificación de 80 casas más para el personal, un segundo campo de golf y un hotel de 120 habitaciones de super lujo, además de ampliar la marina, y continuar la expansión del aeropuerto «para siga siendo líder» (tercero de todo el Caribe y Centroamérica).

«Creemos que nuestro país en algún momento se va a dar cuenta de que la base para su desarrollo está en el turismo. Cuando eso llegue, en esa zona debemos tener más de 50,000 habitaciones», enfatiza el ejecutivo. Y después, el Grupo Puntan Cana estudia posibilidades de expansión a otras zonas del país, y también del Caribe o Centroamérica.

¿Alianzas con grupos internacionales? «Quiero seguir siendo un soñador. Por eso soy el único hotel en la zona que no soy todo incluido, ni soy una cadena. Creo que nosotros tenemos capacidad para ser independientes. Cuando cumplimos 35 años queremos demostrar que sí se puede ser independiente y no ser todo incluido».

Para concluir Rainieri menciona las palabras claves: visión, trabajo duro, perseverancia.