Hoy 
Un fuego destruyó ayer casi de manera total el centro de distribución principal de tiendas Plaza Lama, ubicado en el kilómetro 13 de la Autopista Duarte, en Los Alcarrizos. No se reportaron heridos.
Elsa Pou, gerente de Mercadeo de la empresa, dijo que el siniestro se inició partir de las 4:00 de la tarde y que el almacén fue afectado casi en su totalidad. Agregó que allí guardaban electrodomésticos, plásticos y toda la variedad de mercancías que distribuyen en sus tiendas.
En lo que respecta al monto en dinero que implicarían los daños, señaló que por el momento no pueden cuantificarlos pero que desde que tengan la información la darán a conocer. “Lo importante es que no tenemos pérdidas humanas, sino que todos los daños fueron materiales”, expresó Pou.
Los propietarios, gerentes, empleados y personal de las empresa Plaza Lama estuvieron en el lugar cooperando con las autoridades.
Desde tempranas horas de la tarde brigadas de los cuerpos de bomberos de Santo Domingo Oeste, Santo Domingo Este y del Distrito Nacional intentaban extinguir el incendio que aumentaba en la medida que pasaban las horas.
Con helicópteros. A las labores también se sumaron helicópteros de la Fuerza Aérea de República Dominicana, que rociaban agua para detener las llamas. Gran parte del concreto de la edificación se desplomó por efecto del fuego.
Además de los del cuerpos de bomberos del Gran Santo Domingo, al suministro de agua agregaron varios camiones cisternas de la Corporación de Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD) y del Ministerio de Obras Públicas.
El director del cuerpo de bomberos de Santo Domingo Oeste, coronel José Segura, dijo que aún no se puede determinar lo que provocó el fuego.
Agregó que en las labores utilizaron más de 60 hombres y 30 camiones, sin incluir los casi diez de la CAASD y Obras Públicas.
Destacó la ayuda de los propietarios del establecimiento, quienes en todo momento estuvieron en el lugar dirigiendo y señalando los lugares con los objetos más inflamables.
Cerca de gas natural. El momento de más preocupación fue cuando las llamas se extendían hacia una estación de expendio de gas natural, ubicada al lado del almacén, pero afortunadamente los tanques estaban en camiones móviles y fueron sacados a tiempo.
Lluvia ayuda. El fuego estuvo fuera del control de los bomberos hasta que cerca de las 9:00 de la noche comenzó a caer una llovizna que luego se convirtió en una lluvia torrencial, lo que ayudó a sofocar el incendio.
Debido a la gran humareda que impedía la visibilidad de conductores y para que los camiones-cisterna pudieran entrar y salir al depósito, la Autoridad Metropolitana de Transporte (Amet) desvió el tránsito en dirección oeste-este hacia la Prolongación 27 de Febrero.
Al lugar acudieron curiosos a ver la humareda y las intensas llamas, mientras que agentes policiales los mantuvieron a raya para evitar incidentes.
