Agentes migratorios de República Dominicana iniciarán el jueves patrullajes en las principales ciudades del país para detener y repatriar a los inmigrantes haitianos que no se hayan inscrito en un programa especial para legalizar su estatus. El programa duró un año y cerró en la madrugada del jueves. Apenas cerca de 50% de los extranjeros que viven en el país sin permiso migratorio se han inscrito, según datos del Ministerio de Interior, que coordina el plan.
Decenas de inmigrantes haitianos tuvieron que retirarse la medianoche del miércoles del Ministerio de Interior sin poder inscribirse pese a haber permanecido en la fila por más de 24 horas continuas y haber acudido durante varios días sin ningún resultado.
“No he comido desde ayer, ni bañado, ya estoy cansado”, dijo Bento Baptiste, de 19 años, mientras veía afuera del Ministerio de Interior desvanecerse su esperanza de inscribirse y con ello evitar su eventual repatriación a Haití, donde asegura que con excepción de una hermana ya no tiene ningún pariente.
El plan estaba destinado a otorgar permiso migratorio a los inmigrantes que se instalaron en el país antes de octubre de 2011. Washington González, director del programa, indicó que poco más de 260.000 personas, en su mayoría prevenientes del vecino Haití, lograron inscribirse en el denominado plan de regularización de extranjeros que comenzó en junio de 2014.
Las autoridades estiman, con base en una encuesta elaborada por el Ministerio de Economía en 2012, que en el país viven unos 460.000 inmigrantes haitianos y 60.000 de otras nacionalidades. Tras inscribirse en el plan, los inmigrantes tendrán un plazo para presentar todos los documentos a fin de obtener un permiso de residencia.
Entre quienes no lograron inscribirse y enfrentan el peligro de repatriación se encuentran miles de ancianos haitianos que por décadas trabajaron en los cañaverales dominicanos, muchos de los cuales fueron forzados a migrar mediante acuerdos entre los gobiernos de ambos países para proveer de mano de obra barata a los ingenios azucareros. Grupos de derechos humanos como Amnistía Internacional sostienen en que los descendientes de los inmigrantes haitianos que nunca tuvieron acta de nacimiento también podrían ser expatriados.
Durante el año que duró el plan de regularización el gobierno cesó temporalmente sus patrullajes migratorios en las ciudades pero mantuvo los operativos en la frontera y pueblos limítrofes para impedir el ingreso clandestino de haitianos.
Rubén Paulino, director de Migración, advirtió que a partir del jueves las patrullas recorrerán zonas con alta presencia de haitianos para detener y repatriar a aquellos que no porten el documento que confirme que se inscribieron en el plan de regularización. Ante las inminentes repatriaciones, el gobierno de Haití anunció que construirá cerca de la frontera centros de acogida para dar asistencia a los deportados.