Mantener el pelo fuerte y sano a veces resulta un tanto complicado y estresante, ya que la salud capilar no solo depende del tipo de champú que te apliques, sino de varios detalles, incluyendo la alimentación y la hidratación.
¿Pero, cómo lograrlo?
A través de los tiempos han surgido ciertas creencias con referencia a los cuidados del cabello, que se han vuelto muy populares.
1. Cepilla tu pelo todos los días
Compra un cepillo con cerdas suaves y trata de cepillar el pelo cuando está seco, para evitar que las hebras se quiebren con facilidad.
2. Corta las puntas dañadas
A medida que el cabello va creciendo, se va debilitando, sobre todo en las puntas, que es la parte más “antigua”, por así decirlo.
3. Conoce tu tipo de cabello
Con esta información en tu poder, tendrás la capacidad de elegir los productos de belleza adecuados. Usar los productos que mejor se adapten a tu tipo de cabello es fundamental para lucir un pelo fuerte y sano.
4. Acláralo con agua tibia o fresca
Sí, incluso en invierno. El enjuague final cuando te lavas el pelo siempre debe ser con agua tibia (o más bien, fresca) para permitir a las cutículas que se cierren.
5. Usa productos de calidad
Optar por productos que sean acordes a tu tipo de pelo y que a su vez te brinden buenos resultados. Estos productos te ayudarán a conseguir un pelo fuerte y sano.
6. No abuses del secador o la plancha
Aunque te quede precioso el pelo liso, reduce el número de veces por semana en que te lo secas o planchas. La exposición al calor de estos elementos reseca el cabello, lo vuelve opaco y sin vida. Por todo ello, se vuelve más propenso a quebrarse o abrirse en las puntas.
7. Masajea el cuero cabelludo
Puedes hacerlo mientras te duchas o cuando estás mirando televisión en el sofá.
8. No abuses de los productos químicos
Así como el calor del secador o la plancha es malo para la salud del pelo, ciertos productos habituales también lo pueden dañar. Es el caso de los tintes y los tratamientos para alisar (incluso si son de buena calidad).
9. Evita el sol y la piscina
Cuando llega el verano y las vacaciones es probable que el pelo se vea opaco y débil. Esto es por la exposición al sol, al cloro que se le añade al agua de la piscina o a la sal del mar.
10. No lo laves en exceso
Tanto el cuero cabelludo como las hebras necesitan varias horas para secarse por completo. Además, cuantas más veces nos lavamos el pelo, menos aceites naturales tendrá este y más opaco se verá.
11. Mantén una alimentación saludable
Además de cuidarlo por fuera, el cabello debe ser nutrido por dentro. Es fundamental entonces que comas de forma equilibrada y añadas a tus platos muchas frutas y verduras frescas. Tampoco deben faltar los frutos secos, las legumbres y el agua.
Con información del portal Mejor con Salud