La realidad des las familias y especialmente de los jóvenes que viven en los barrios de la capital es muy dura, es muy difícil.

Y es que los jóvenes tienen que lidiar con: la pobreza, el poco acceso a los servicios básicos, desde el agua potable, la electricidad, la falta de espacios públicos y la recogida de basura.

En la otra esquina deben aprender a convivir con la violencia, las bandas , el tráfico de drogas y el acoso constante de los patrullajes mixtos.

La educación es la única salida para los jóvenes que viven en este estado de vulnerabilidad. Sin embargo, como si todo lo antes citado fuera poco, les toca cargar con el estigma social de ser de un “barrio malo”.

Con el objetivo de transformar y alentar acciones que cambien de manera integral los entornos, convirtiéndolos en lugares más óptimos para vivir nace el movimiento social «Barrio Alante», una red de jóvenes políticos luchando por la justicia y los derechos desde y para el barrio.

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Esta iniciativa que está integrada por 37 organizaciones de la provincia de Santo Domingo, es coordinada por la joven activista Paola Estévez, quien explicó que la plataforma además de visibilizar las necesidades de los diferentes sectores populares está presentando soluciones para mejorar el entorno, promoviendo el talento que artístico que nace el barrio y unificando los diferentes sectores que hacen vida en el barrio para generar soluciones a las personas en conjunto.

“La vocación de este movimiento es impulsar la visión de los derechos en los barrios, que la gente pueda vivir con algo más que el mínimo vital que es con lo que actualmente viven”, asegura Paola.

Así mismo, dijo que para lograrlo han partido de un conjunto de actividades para fomentar la cultura, desde el entendido que la cultura barrial debe hacerse con la gente que vive ahí.

“Y entendiendo que el arte y la cultura son el resultado de los contextos sociales y políticos que se viven dentro del mismo barrio”, destaca la activista.

De igual manera puntualizó que ‘Barrio Alante’ busca que las propuestas no se construyan desde lejos, “no se pueden buscar soluciones desde lejos de quienes viven la problemática porque en ese caso no existiría una solución real”.

Una historia distinta

Para lograr movilizar el barrio los representantes de este movimiento están realizando diferentes proyectos culturales, uno de ellos es el ‘Festival de los Colores’, realizado recientemente en la 42 de Capotillo donde artistas urbanos pintaron murales, incluyendo el mural de los mandamientos en la 42 de Capotillo.

“Ahí están escritas todas las reglas que debemos seguir para ofrecerle un barrio a las futuras generaciones”, explica Paola.

“Queremos demostrarle a la sociedad que la juventud puede y que hay elementos nuevos que el arte y sus diferentes manifestaciones pueden contribuir a ello”, dice Rafael Abreu, artista y representante del movimiento ZM Music de Capotillo.

También desean que se les quite el estigma de ser de ‘barrio caliente’ “Cuando nosotros ponemos que somos de Capotillo en un curriculum nadie te llama. La gente cree que uno eres un delincuente por más preparación que tenga”, dice Jorge Santiago del movimiento social ‘Habla la calle RD’.