BUENOS AIRES. La caída en los precios internacionales de productos agrícolas como la soja y el maíz impactará en forma negativa en la economía de Argentina en 2015, con una baja en el ingreso de divisas de casi un 15% respecto de 2014, señalaron analistas. El problema para el país, es que el atesoramiento de dólares por liquidación de exportaciones es la mayor fuente de reservas para el Banco Central, a raíz de que Argentina se mantiene voluntariamente fuera de los mercados financieros.
La nación sudamericana perderá de embolsar entre 3.000 y 4.000 millones de dólares el año próximo si se mantiene la actual tendencia declinante en el mercado de Chicago, indicaron expertos agrícolas. Las exportaciones agrícolas representarán este año unos 27.000 millones de dólares (sobre ventas externas globales por 80.000 millones), según la Bolsa de Comercio de Rosario, 300 Km al norte, el mayor polo agroexportador.
«Hay una baja importante en los mercados de commodities (materias primas) a causa del fortalecimiento del dólar y la excelente perspectiva de cosecha en Estados Unidos», dijo a la AFP Guillermo Rossi, analista de la Bolsa rosarina, en la rica provincia de Santa Fe (centro-este).
Estrés fiscal y monetario. En el caso de que menos ‘agrodólares’ entren por exportaciones, también sufrirá estrés el fisco, cuya recaudación de impuestos será más baja, a la vez que se debilitará el flujo de divisas hacia las reservas el Banco Central.
La noticia no es buena para las reservas monetarias que se ubican apenas por arriba de los 28.000 millones de dólares, alrededor de la mitad que hace tres años. La tensión se instaló en el mercado cambiario por una brecha que ronda el 80% entre la cotización oficial y la informal del billete norteamericano.
Esta posible caída en el ingreso de divisas aparece en un mal momento, en medio de un conflicto por un impago de la deuda con fondos especulativos en Estados Unidos que hundió en la incertidumbre a los mercados. «Las primeras estimaciones para la soja y otros productos arrojan una pérdida para 2015 de 4.000 millones de dólares por disminución de precios», dijo a la AFP Gonzalo Augusto, economista de la Bolsa de Cereales de Córdoba (centro del país), otra gran provincia productora de granos, en referencia a lo que el país podría dejar de embolsar. El Gobierno recaudará este año entre 8.000 y 9.000 millones de dólares por impuestos al sector, pero la retracción sería el año venidero de unos 1.000 millones.
Sin embargo, los derechos sobre exportaciones representan un volumen no tan considerable en un país cuya recaudación fiscal global en 2013 fue de 131.000 millones de dólares. El sector gubernamental clave a mirar no sería tanto el fisco como lo es la institución bancaria rectora.
«La venta de soja es normal, pero lo que pasa es que bajaron mucho los precios», dijo a la AFP Miguel Campetela, un agricultor sojero de Córdoba.
La salvación china. El valor de la tonelada de maíz cayó en el mercado internacional desde julio de 180 a 130 dólares, en tanto que la soja se desplomó de unos 500 a 340 dólares en igual período.
«Para 2014 prevemos una producción récord de soja y maíz en los tres principales países productores, que son Brasil, Estados Unidos y Argentina», dijo en Buenos Aires William Chambers, analista de la secretaría (ministerio) norteamericana de agricultura, el USDA, en un seminario esta semana en la Bolsa de Cereales. ¿Cuál será entonces el piso para la actual caída de precios?.
«No lo sabemos –respondió Rossi– pero si caen tanto, en algún momento los chinos volverán a encontrarlos atractivos y se recuperarán», vaticinó.