En un mundo donde la información fluye sin descanso a través de las redes sociales y plataformas digitales, surge una pregunta cada vez más relevante: ¿Puede una persona pedir que se borre una noticia en la que esté involucrada, especialmente si esta información puede dañar su imagen o reputación?
Este debate ha cobrado vida en torno al caso del propietario de un Ferrari rojo, quien pidió a medios de comunicación a que eliminaran el video del accidente que tuvo en la Av. Abraham Lincoln el pasado domingo, pese a que ya es viral y causó un revuelo mediático.
La abogada Anny Guzmán explicó que aunque no existe una ley específica que prohíba la difusión de imágenes de estos incidentes, la Constitución y varias leyes secundarias establecen claramente los límites que deben respetarse para evitar la violación de derechos fundamentales.
«La Constitución es clara en cuanto a la protección de la imagen, el honor y la dignidad de las personas. Difundir imágenes o información que pueda lesionar estos derechos fundamentales sin el consentimiento de la persona afectada es una violación constitucional», expresó la abogada, refiriéndose específicamente al artículo 44 de la Constitución, que garantiza el respeto a la intimidad y la propia imagen.
Además, la experta indicó que la Ley 61-32 establece mecanismos para que las personas afectadas puedan solicitar la desvinculación de imágenes o información que vulneren sus derechos.
«Cuando se difunden imágenes o información que pueden afectar la dignidad de una persona, sin su consentimiento, se está violando un derecho fundamental. Esta ley, junto con la Ley de Habeas Data, protege a los ciudadanos del uso indebido de datos personales, que podrían obtenerse, por ejemplo, a través de la divulgación de una placa vehicular porque con ella se puede obtener una amplia información de la persona«, dijo.
Ante estas situaciones, la letrada exhortó a los medios de comunicación que, antes de difundir una información que involucre datos personales o imágenes sensibles de sangre y demás, se asesoren adecuadamente, para evitar violaciones a los derechos de los involucrados.
«En casos donde una persona considere que su imagen ha sido utilizada sin su consentimiento, puede solicitar la desvinculación de dicha información de manera amigable con el medio, y en caso de negativa, recurrir a vías legales, incluyendo la intimación por medio de un alguacil y, si es necesario, una demanda ante los tribunales», argumentó.