P: ¿Sabía usted que la deshidratación puede provocar una crisis de migraña o jaqueca?
R: La migraña es un tipo de cefalea que se manifiesta con un dolor de cabeza intenso o grave, generalmente en un lado de la cabeza, que puede acompañarse de náuseas y vómitos y/o intolerancia a la luz, al sonido y/o a ciertos olores. Las crisis de jaqueca pueden ser desencadenadas por factores dietéticos (hambre, deshidratación, alimentos con nitritos, aspartame y glutamato de sodio, bebidas cafeinadas, chocolate, quesos añejos, vinos, bebidas alcohólicas, saltarse comidas, hipoglucemia, etc), psicológicos (ansiedad, depresión, estrés y período posestrés), hormonales (mayormente, durante de la menstruación y ovulación por la caída repentina de estrógenos, igual que la suspensión espontánea de la píldora anticonceptiva), farmacológicos (estrógenos, analgésicos, nitroglicerina, etc), ambientales (olores, estímulos visuales, exceso o falta de sueño, cambios atmosféricos y altitud elevada) y ejercicio físico brusco, entre otros.
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La falta de agua provoca que los vasos sanguíneos se contraigan con el fin de ahorrar el consumo de agua por los tejidos y mantener un volumen sanguíneo adecuado. La contracción de los vasos sanguíneos causa una menor irrigación del cerebro y disminución de la oxigenación de las neuronas, lo cual resulta en dolor de cabeza, una señal que nos mueve a tomar agua, para aliviar los síntomas asociados a la deshidratación (migraña, sed, confusión mental irritabilidad, falta de concentración, irritabilidad, náuseas, mareos, etc.). En realidad, el cerebro no duele, lo que duele son las meninges (membranas que cubren al cerebro) y los tejidos que cubren este órgano, las arterias y los nervios que van en este espacio. Por lo tanto, si el cerebro está deshidratado habrá mayor roce de estas estructuras con el cráneo, y eso va a favorecer la aparición del dolor de cabeza.
Cuando tomamos agua los vasos sanguíneos aumentan su diámetro, disminuye el trabajo del corazón, el cerebro se oxigena y nutre adecuadamente. Un cerebro bien hidratado piensa mejor y mantiene tu cuerpo relajado. El agua es vida.